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Cómo achicar la brecha entre el potencial de rinde del lote y lo que finalmente consigue el productor

Sobre eso se centró la Jornada de Nidera Semillas en la ciudad entrerriana de Victoria, donde los más de 150 productores presentes compartieron conocimientos con referentes de la agricultura.

Desde Victoria, Entre Ríos, Nidera se propuso charlar con más de 150 productores acerca de algo que viene sonando entre los actores de la agricultura: hay una brecha entre el potencial de renidmiento de los lotes y el que finalmente se alcanza.

Para pensar en formas de achicar y hasta eliminar esa brecha, Nidera Semillas propone el objetivo de generar más y mejores herramientas que puedan explotar todo el potencial del lote. Nicolás Brandstater, gerente de Marketing de Nidera, dialogó con Radio Campo -por Radio Colonia.

El especialista de la compañía marcó que una de las claves para conseguirlo es intercambiar los datos y experiencia del productor en su campo con el conocimiento de los distribuidores de la firma sobre cada uno de sus materiales. “Esto permite hacer recomendaciones bien efectivas”, dijo.

Además, el miembro de Nidera resaltó que esto requiere de un trabajo en equipo para fortalecer no sólo el vínculo de la empresa con el cliente, sino también generar relaciones nuevas con profesionales y especialistas en la materia, que puedan seguir aportando datos precisos para una mejor ecofisiología y protección vegetal.

En en la misma línea que desde la compañía pensaron la puesta en marcha de muchas de sus iniciativas más vinculadas a la tecnología, que ya están funcionando en campos de todo el país. Con el Asistente Dinámico Nidera (ADN) consiguen recolectar información sumamente necesaria que está a disposición de los clientes. Pero además, los drones del programa Nidera Vuela ya toman datos de los productores en sus lotes y les comparten la importación más precisa sobre el estado de los cultivos.

A la vez, la última novedad de Manejo Variable en siembra, les permitió acercarse a los clientes con algo innovador y que lleva a repensar los esquemas productivos, dejando de ver las condiciones del lote para hacer la siembra, y empezando a mirar cómo es cada ambiente dentro del mismo para poder hacer una siembra realmente efectiva.