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Malargüe apuesta al turismo rural

Malargüe tiene atractivos inigualables a los que su comunidad suma nuevas propuestas como el turismo rural en la ruta 40 sur, a la altura del paraje Agua Botada. Cabalgatas, senderos ecológicos, arte rupestre, fósiles, caminatas, circuitos para personas sin movilidad (sulky en cordillera o mountain bike), arqueología, paleontología,...

Malargüe tiene atractivos inigualables a los que su comunidad suma nuevas propuestas como el turismo rural en la ruta 40 sur, a la altura del paraje Agua Botada.

Cabalgatas, senderos ecológicos, arte rupestre, fósiles, caminatas, circuitos para personas sin movilidad (sulky en cordillera o mountain bike), arqueología, paleontología, gastronomía con comidas típicas, camping, pesca, ascenso a montañas y cielos estrellados son algunas de las opciones que promete el lugar. Todo acompañado por la riqueza paisajística y cultural que Malargüe puede ofrecer.

Lisandro Jaeggi y Javier Macario (del INTA), Hugo Tucker (del Cridc) y Débora Ferrero (de Turismo municipal) son algunas de las personas que se vienen reuniendo con pobladores de Agua Botada para darle forma a este proyecto de turismo rural, formado por pequeños emprendimientos familiares. 

Desde hace unos años, Jaeggi y Macario se reúnen con los pobladores dentro del programa Cambio Rural del INTA. Jaeggi explicó a Los Andes que “son seis puestos principalmente ganaderos, con actividad caprina. Tienen algo a favor para el emprendimiento y es que son propietarios de las tierras. Queremos adaptar estos lugares a la apertura y visita del turista. Están a solo 35 kilómetros de Malargüe, con buena accesibilidad y con servicios básicos como la energía eléctrica y pronto Internet”.

Además, señaló que el sitio está muy cerca de la Caverna de las Brujas y camino a La Payunia. El médico veterinario se mostró confiado y recalcó: “Queremos que sea un nuevo polo turístico, con servicios que hoy no existen. Que el visitante pueda vivir la experiencia de tener un día de campo con las características de Malargüe, que son distintas a otras del país, con producción caprina en ambientes cordilleranos. Además, tenemos la posibilidad de recuperar la cultura del lugar incluyendo artesanías y gastronomía local. Es un proyecto ambicioso y esperamos pronto poder abrirlo al público”.

Desde la dirección de Turismo, Ferrero sostuvo que “los cambios siempre son buenos” y agregó que en este emprendimiento hay mucha gente joven que vive en los puestos en los que se está trabajando.

“Es algo muy importante para la familia, para estas personas de campo que realmente quieren quedarse en su lugar. Y que quizá se resisten a irse a las ciudades, y más siendo jóvenes. Con esto queremos apostar a las raíces, a que se queden en el lugar y la sigan luchando”.

Entre los obstáculos que se presentan, Jaeggi mencionó los baños: “Nos pedían unos que eran muy grandes y costosos, pero la Municipalidad nos está diseñando baños más chicos. Eso nos frenaba el proyecto pero en breve lo vamos a solucionar, incluso con baños adaptados para personas con discapacidad”.

Otro inconveniente es la comunicación, ya que para poder llamar por teléfono los puesteros deben subir a un cerro y buscar señal. En este sentido, Jaeggi anticipó que “la fibra óptica les pasa por la tranquera, estamos trabajando para solucionarlo”.

Se espera que el próximo verano algunos de estos servicios ya estén habilitados.