La senadora rionegrina Magdalena Odarda (Coalición Cívica) presentó un proyecto de ley en la Cámara alta en el que se “prohíbe” en todo el país “la utilización de cualquier método de marcación animal que no sea a través de un dispositivo electrónico de radiofrecuencia”, también conocido como “chip”.
Pese a que la legisladora representa a una banca de escaso peso numérico en el Senado su proyecto para la prohibición de las carreras de galgos tuvo el respaldo suficiente como para convertirse en ley. Lo mismo que la ley de protección a los humedales, que aprobó el Senado, aunque en este caso con numerosas reformas.
Lo que parece recurrente en la legisladora es su vocación por la “prohibición” así como la polémica ley de los galgueros “prohibió” la actividad, ahora se propone igualmente “prohibir” por ley cualquier identificación animal que no sea con un chip.
Para los abogados penalistas, las leyes no pueden “prohibir” sino sancionar conductas. Si fuera tan sencillo se prohibiría la corrupción, el asalto a mano armada, la violación o lo que fuere y el problema estaría resuelto. Lo curioso es que, en su proyecto, Odarda no propone ningún régimen de sanciones para el que no cumpla con la prohibición.
Una de las principales razones que expone la senadora para justificar la “prohibición” en el uso de marcas y señales a la hacienda es que “no sólo estaremos evitando procedimientos que les generan sufrimiento a los animales sino, además, sustituiremos mecanismos poco fiables”.