El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una nueva serie de alertas naranjas y amarillas ante el avance de una “supercelda” o “tormenta supercelular”, que ya generó caída de granizo de gran tamaño y ráfagas de viento de más de 100 kilómetros por hora.
¿En qué consiste este fenómeno? ¿Cuál es la diferencia con el resto de las tormentas? ¿Hasta cuándo durarán? ¿Qué recomiendan los especialistas? Para responder esas y otras dudas.
El meteorólogo del SMN, Lucas Berengua, explicó que “se denomina ‘supercelda’ a las nubes de tormenta que son capaces de provocar granizo más grande de lo normal y ráfagas de viento violentas, que están asociadas al desplome de aire frío, a las corrientes de aire ascendentes y descendentes, y a mucha cantidad de lluvia en poco tiempo”.
De acuerdo con el especialista, una característica de la tormenta supercelular es que, a diferencia de una nube de tormenta común, que tiene un ciclo de vida de entre 20 y 40 minutos, esta puede tener un ciclo de vida de muchas horas y ocasionar destrozos en una gran cantidad de kilómetros.
“La supercelda de la que se habló en la primera parte de la tarde de este martes nació entre las 13.30 y 14 horas en el Oeste de la provincia de Buenos Aires, recorrió más de 300 kilómetros y tuvo un ciclo de vida de más de 4 horas. Esa misma supercelda fue la que pasó por varias localidades de la provincia de Buenos Aires. La más significativa, y de la que más noticias se tiene es 9 de Julio, en donde provocó voladura de techos, la destrucción de varios hangares en el aeródromo y granizo de gran tamaño. Luego pasó por Bragado e, incluso, llegó al Sur del AMBA. Inclusive, pasadas las 19.45, continúa su vida activa entrando a Uruguay, al Oeste de Montevideo”, detalló el especialista.
Y agregó: “Cerca de las 20, se registró otra supercelda ingresando a la ciudad de Buenos Aires”.
Según el meteorólogo, las superceldas más poderosas son las que producen tornados destructivos. “Solo algunas logran esta característica porque no solo se necesitan los combustibles básicos para la formación de tormentas; sino que además se necesitan algunos adicionales, como el ordenamiento del viento con la altura”, dijo.
Consultado acerca de antecedentes de superceldas en nuestro país, Lucas Berengua aseguró que en la llanura pampeana, así como en la zona serrana de Córdoba y en Mendoza, “este tipo de tormentas son normales, cuando las condiciones son las adecuadas”.
En Córdoba, justamente, la Policía Caminera advirtió acerca de la ocurrencia de “vientos ocasionalmente fuertes en zonas elevadas de sierras, valles y ladera de montaña” para la mañana del día miércoles.
En ese contexto, recomendó a los conductores reducir la velocidad ante la pérdida de visibilidad; aumentar la distancia entre vehículos; y alejarse de la banquina en caso de detenerse para evitar accidentes.
Cómo seguirá el tiempo esta semana
Según indicó el SMN continuarán las lluvias y tormentas de variada intensidad durante la noche del martes 19 y el miércoles 20 de marzo. El tiempo recién mejorará entre el miércoles a la noche y el jueves 21. Además se espera un brusco descenso de temperatura.
¿Se esperan más tormentas supercelulares? “Las superceldas no se pueden pronosticar individualmente. Lo que se pronostica es el entorno favorable para la formación de las mismas. Esas condiciones son las que dan lugar al aviso de alerta meteorológico naranja, que está emitido desde hoy tanto para el AMBA como para el norte de la provincia de Buenos Aires. Por eso se recomienda estar continuamente actualizado al sistema de alerta, porque al ser un fenómeno tan fuerte y tan dinámico puede tener actualizaciones en el medio”, indicó el especialista a Infobae.
En este contexto, el SMN emitió una serie de recomendaciones a lo ciudadanos, entre ellas, permanecer en construcciones cerradas como casas, escuelas o edificios; mantenerse alejados de artefactos eléctricos y evitar el uso de teléfonos con cable; en caso de estar viajando, quedarte en el interior del vehículo ya que los automóviles ofrecen una excelente protección; evitar circular por calles inundadas o afectadas; y cortar el suministro eléctrico si hay riesgo de que el agua ingrese al domicilio.