Una de las novedades que traerá la 11° edición de Expoagro es el “Taller de Maquinarias”, un espacio diseñado junto al INTA que busca aportar soluciones a las problemáticas que afrontan los operarios de maquinarías agrícolas. De la mano de los más destacados especialistas se brindarán consejos para optimizar el desempeño de cada uno de los equipos, dividido en cuatro grandes temáticas: ajuste de sembradoras de siembra directa, control de deriva en pulverizaciones, una correcta utilización del tractor agrícola y en la parte de cosecha cómo lograr un buen funcionamiento del cabezal maicero.
Los talleres gratuitos se desarrollarán los tres primeros días de la exposición a las 9:00, 10:00, 14:30 y 15:30, intercambiando rotativamente las cuatro clases. La modalidad consiste en una parte teórica y otra práctica, de una hora de duración cada una. La primera se realizará en un salón lindero al Tecnódromo y luego se pasará a aplicar los conocimientos directamente a los lotes donde estarán ubicadas las distintas máquinas. “La metodología no va a ser la de un disertante que da una conferencia, sino que será un taller en el que se va a trabajar en conjunto con cada uno de los participantes”, comenta Hernán Ferrari, del Grupo Mecanización Agrícola del INTA, quien será además el encargado de coordinar los talleres.
La iniciativa está dirigida a operarios, contratistas y profesionales, que son aquellos que cotidianamente están en contacto con las maquinarias, y que encontrarán en la exposición una oportunidad única para capacitarse de manera gratuita. “Todas las problemáticas que tengan los participantes se van a estar resolviendo”, apunta el también ingeniero agrónomo Ms. Scs. de INTA Concepción del Uruguay, que recibirá todas las inquietudes que pueden surgir en momentos tan delicados para ciertas zonas de la producción agrícola del país, aquejadas recientemente por inundaciones o fuertes sequías. “Se va a trabajar sobre las especificidades que estamos teniendo hoy en día con el cambio climático”, agrega.
“Sin duda que la maquinaria agrícola que se está usando en Argentina es maquinaria de punta, y puede ser comparada con la última tecnología que sale en Alemania o Estados Unidos”, afirma Ferrari. Y en ese sentido, las empresas que acompañarán y participarán de cada una de las actividades están a la altura de las circunstancias con el alto nivel de innovación de los campos argentinos. En primer lugar se destacan los tractores de la empresa Agrale, que asistirán con sus equipos de tracción simple, tracción asistida y doble tracción. En la parte de deriva y pulverización se presentará Metalfor con sus últimas pulverizadoras de serie 2000. En cuanto a cosecha, Mainero estará con sus modelos de cabezales serie 2008, de multidirección y multilínea. Y en lo que respecta a sembradoras, la firma Apache estará aportando sus unidades.
Los principales referentes en cada uno de los temas estarán presentes en esta nueva iniciativa de Expoagro, como es el caso del ingeniero agrónomo Mario De Simone, del INTA Salta, quien será el encargado de llevar adelante el taller “Un amigo de fierro” y brindará una serie de consejos para eficientizar el uso de los tractores. En este caso, el desafío se centrará en reducir el consumo de combustible, ya que se estima que se desperdicia un 30% de gasoil en las operaciones del sector agrícola, lo que eleva de manera notable los costos del productor. También se hará foco sobre los beneficios de los neumáticos radiales, que prácticamente no compactan el suelo y se puede llegar a alcanzar un 30% más de rendimiento en los cultivos. “Se va a trabajar mucho además en mantenimiento, filtros de aire y combustible, calibración de neumáticos y todo lo que sea para lograr una mayor longevidad del tractor agrícola”, añade Ferrari.
“Cada gota cuenta”, es el nombre del taller dedicado a analizar las problemáticas sobre control de deriva y pulverización, que estará a cargo de los doctores Santiago Tourn y Pedro Platz, de la Facultad de Ciencias Agrarias Unidad Integrada y del INTA Balcarce. El eje de esta actividad pasará principalmente por reducir al máximo el impacto ambiental en las aplicaciones, pero también en hacer un uso eficiente de los agroquímicos y fitosanitarios. Para ello, se pondrá especial énfasis en el tamaño que debe tener la gota en función de la velocidad del viento. “Con una velocidad de 10 kilómetros por hora podemos trabajar en el centro de un lote grande con gotas pequeñas de 250 micrones y con una gota más grande de 400 micrones en las cabeceras”, aconseja Ferrari para hacer un muy buen control de plagas que no afecte a los campos vecinos o las zonas urbanas. Las prácticas también abordarán la importancia de la calidad del agua que se usa para la pulverización o el fenómeno de la inversión térmica que es un factor limitante para las aplicaciones en varias zonas del país.
En la parte de cosecha, las prácticas van a estar dirigidas hacia una utilización eficiente del cabezal maicero. Los ingenieros Federico Sánchez y Gastón Urrets, de INTA Manfredi, dictarán el taller “Ganar de punta a punta”, donde se desplegarán una serie de consejos para lograr una adecuada regulación del cabezal y tratar de reducir las enormes pérdidas que se generan en este aspecto. “Son casi 180 millones de dólares al año los que se desperdician por el desgrane de espigas y una mala calibración de la chapa que cubre el rolo del cabezal”, apunta el coordinador de las actividades. Diversos estudios realizados por el INTA determinaron que estas pérdidas podrían bajar hasta un 30% o 35% si las operaciones se realizaran de manera correcta.
Por último, el propio Ferrari será el encargado de encabezar las prácticas sobre siembra directa en “Ella es el principio”. “Voy a estar trabajando principalmente en tren de siembra, como regular bien la cuchilla rastrojera y la de microlabranza y cómo ajustar todos los círculos, picadores y órganos de bajada”, asegura el especialista del INTA. Otras de las principales problemáticas que se atenderán en el curso tienen que ver con lograr una buena configuración de ruedas tapadoras y las distintas variables en discos abresurcos, donde el experto recomienda aquellos en forma de V, que actúan mejor y permiten que la semilla se ubique siempre en el fondo del surco.