De la mano del salto del dólar frente al peso y la necesidad de la demanda local, las ofertas de compra por soja en el recinto de la BCR se mantuvieron firmes a pesar de las cuantiosas pérdidas en el mercado internacional. Los valores de la oleaginosa desde inicios de la semana fueron escalando hasta tocar los $ 3.850 como valor abierto, pero con negociaciones bajo la condición contractual que llegaron a los $ 3.900/t. La pizarra tocó $ 3.880 por tonelada el miércoles 18; máximo valor desde mediados de marzo de este año disparando las ventas.
Pese a ello, se viene observando desde hace meses que el volumen negociado está muy por debajo de lo esperado para esta época. Si bien, las subas locales le dieron aire fresco al mercado, muchos productores se estuvieron interesando más en las herramientas financieras que en vender soja. Por otro lado, los créditos para financiar sus costos permiten una mayor flexibilidad en las ventas del poroto en el tiempo.
Ahora bien, el tipo de cambio local el día jueves 19 marcó una suba del 8% en una semana, pasando de $ 15,335 a 15,900. Con este fortalecimiento del dólar sumado a la sostenida demanda interna, los productores podrían especular con llegar al valor psicológico de $ 4.000/t. Sin embargo, como se observa en el gráfico realizado por el analista Federico de Di Yenno, los márgenes por el lado de los compradores se encuentran en terreno negativo. Con un FAS teórico (o capacidad de pago de la industria) en el orden de los u$s 235/t de alguna forma se limita la potencial suba de la oleaginosa en el mercado local.
En el ámbito internacional los futuros de soja en Chicago marcaron una fuerte caída de u$s 11 para el contrato de julio, tocando los u$s 347/t ante la abrupta devaluación del real brasileño del 8,5%. Esto impulsó una agresiva venta por parte de los productores de Brasil del orden de 3,5 Mt en un día compitiendo con la soja americana.
El sostén de la actividad exportadora en maíz
Las ofertas en el recinto de la BCR convalidaron los $ 2.400/t, aunque se podía mejorar $ 50 por volumen. Dentro de las posiciones diferidas, las ventas se gatillaban en u$s 150/t en la posición junio o a partir de los u$s 140/t en el mes de julio. El sostén se explica por la exportación, que compró esta semana 410 mil toneladas, superando al monto de la semana previa y alcanzando las 12,4 Mt.
Mientras tanto, la cosecha del cereal esta semana encontró mayores dificultades ante los caminos en mal estado y la alta humedad atmosférica. Pese a ello, la colecta a nivel nacional se acerca al 40%, superando levemente al promedio de las últimas 5 campañas que se encuentra en 38,5 %.
En Estados Unidos, la siembra del cereal pudo acomodarse al ritmo promedio de las últimas 5 campañas. El USDA el lunes 15 reportó un avance semanal de 24 puntos porcentuales, alcanzando así un 71% del área cubierta con maíz. Esto expone la enorme capacidad de trabajo del farmer cuando hay buenas condiciones climáticas. Sin embargo, hay un cierto temor en el mercado ante la cercanía del cierre de la ventana de siembra y los pronósticos de lluvias anunciados en la principal zona maicera, según muestra la imagen satelital de Rain-Alarm. Esto podría generar un retraso de las labores exponiendo al periodo crítico del cultivo en condiciones adversas, o directamente reemplazarlo por soja.
Arrancó la temporada 2017/18
A nivel nacional, las sembradoras trigueras arrancaron por el norte cubriendo un 2,8 % del área, según el último reporte de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. En tanto, lotes embarrados y napas altas en la región núcleo encienden una alerta a la siembra de ciclos largos del cereal, cuya fecha óptima de siembra es el 25 de mayo. Sin embargo, la intención de aumento de área se mantiene firme dentro del rango del 5-10% respecto al año anterior. La ventana de siembra se extiende hasta principios de julio ante la utilización de variedades de ciclo corto, por lo tanto al menos que ocurra un evento húmedo de relevancia, la siembra del cereal se podría completar. Mientras tanto, los pronósticos de lluvia a corto plazo concentran su descarga en la provincia de Buenos Aires y La Pampa.
Respecto a la comercialización de esta campaña 2016/17, si bien el adelanto de las compras respecto al ciclo anterior se mantiene con 12,5 Mt, el ritmo fue mermando en las últimas semanas. La exportación lleva adquiridas 9,7 Mt, pero aún actúa de sostén del precio del cereal ante la necesidad de abastecer al principal destino: Brasil. La Cámara Arbitral marcó $ 2.580/t, su máximo valor desde fines de febrero, mientras que los futuros de julio a septiembre superan los u$s 170/t.
Mientras tanto, en Estados Unidos, la debilidad del dólar en la semana sumó algunas ganancias al cereal que también encontraron apoyo en las nevadas y condiciones húmedas no favorables para las Planicies.