El ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, aseguró este miércoles que el Gobierno “no va poner en riesgo la plata de los argentinos”, en referencia al salvataje prometido a la cooperativa láctea Sancor, sumida en una profunda crisis.
El funcionario habló con Radio Mitre Córdoba tras la decisión de la asamblea de la empresa con sede central en Sunchales de aprobar el plan de reestructuración que, entre otros aspectos, contempla la integración de un fideicomiso en el que el Gobierno nacional aportará 450 millones de pesos.
Pesada herencia
Según Buryaile, “Sancor viene con problemas hace mucho tiempo. En algún momento se decía que (el ex presidente de Venezuela, Hugo) Chávez iba a comprar Sancor, porque le vendió leche en polvo a Venezuela y salió de una situación de coyuntura, pero los costos que eran un problema mensual pasó a ser un problema crónico. Nosotros heredamos eso, nosotros refinanciamos la deuda y tampoco alcanzó”.
Para el ministro, “la solución es procesar más leche, bajar los costos, optimizar los recursos humanos; eso va a ser que Sancor mejore”.
En ese marco, reconoció que el Estado ha aportado 200 millones de pesos para que muchos productores pudieran seguir trabajando, entregando leche, y sostuvo: “vamos a ayudar a la empresa, pero la primera que se tiene que ayudar es ella misma”.
“Nosotros no vamos a poner en riesgo la plata de los argentinos. Hemos librado 200 millones de pesos, pero hay varias cosas que los distintos actores tienen que ayudar para que la empresa pueda seguir adelante”, advirtió el titular de la cartera agroindustrial.
Inaes y gremio
Otro aspecto que mencionó Buryaile es que el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes) “revisará todo lo que haya que revisar”, porque “los primeros responsables” de esta situación “son los socio cooperativistas”.
También se refirió a los conflictos que hubo en este proceso por la negativa de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (Atilra) a modificar el contrato colectivo que obligaba a las empresas lácteas a un aporte extraordinario por operario que se había vuelto inviable.
Al respecto, Buryaile contestó: “Nosotros fuimos los primeros que le pusimos el cascabel al gato. Ahora vamos a modificar el convenio colectivo de trabajo; tenemos algunos dirigente sindicales, o el sindicato rico, y los productores con problemas serios, este Gobierno fue el único que se plantó y dijimos que esto no lo íbamos a acompañar”.
“Nosotros asumimos los costos y queremos que Sancor esté por encima de esa situación. Ahora hagamos una mea culpa los productores, lo que sucedía no es responsabilidad de este Gobierno. Los productores tenemos que asumir las responsabilidades que nos competen”.