Los productores frutícolas del Alto Valle volvieron a reclamar esta semana el pago de las deudas pendientes por el seguro de granizo, ya que el Estado provincial apenas pagó cuatro de las seis cuotas comprometidas para resarcir los daños de la cosecha 2016. El secretario de Fruticultura de Río Negro reconoce la deuda pero sostiene que tal como está planteado el actual Ente compensador de granizo es “inviable”.
El “Programa Compensador para daños ocasionados por granizo de la Provincia de Río Negro” en producciones frutícolas, vitícolas y/u hortícolas fue creado en 2011 por la Ley E 4.581 y tenía como finalidad “el resarcimiento de tales perjuicios hasta el Costo Medio Operativo Directo (CMOD) por kilogramo que se defina para cada especie”, en plantaciones de frutales de pepita, carozo y vid (con un tope de dos millones de kilogramos, para evitar quebrantos del fondo). El fondo compensador del que salen las indemnizaciones es de carácter mixto y se encuentra integrado por aportes del Estado Provincial y de los propios productores. La autoridad de aplicación es el Ministerio de Producción de la Provincia de Río Negro, a través de su Secretaría de Fruticultura.
En 2013 se introdujo una reforma a la ley, que estableció que los productores que hubieran adherido al Programa Compensador no podrán ser beneficiarios de ningún tipo de asistencia por parte del Estado provincial para siniestros por granizo, a menos que se declare “desastre o catástrofe climático”. La adhesión al programa no condiciona la contratación de cualquier otro tipo de seguro comercial.
La cosecha 2016 se aseguró en octubre de 2015 y las cuotas debieron ser abonadas durante el primer semestre del año pasado, pero solamente se hicieron efectivas las cuatro primeras, quedando pendientes aún dos cuotas del año anterior y el pago completo del seguro para la cosecha 2017 para los productores afectados por el granizo. Uno de los productores a los que se le adeuda el pago declaró al diario Río Negro: “Ni siquiera el Estado cumple con lo que le corresponde en momento donde la fruticultura esta quebrada. Nos deben plata que nos corresponde”.
“Para nosotros es mucho dinero, son fondos que necesitamos para poder empezar a podar y para cancelar compromisos de la temporada. Lo insólito es que estamos haciendo un reclamo por lo que nos corresponde”, explicó otro de los afectados por el incumplimiento del Estado provincial.
Desde la Secretaría de Fruticultura, encabezada por Carlos Banacloy, reconocen el atraso en los pagos pero sostienen que “el ente de granizo tal como está propuesto, es inviable”. Banacloy plantea la necesidad de revisar íntegramente el mecanismo del seguro para volverlo más amplio y solidario, como forma de garantizar su sustentabilidad en el tiempo. El funcionario explicó: “La provincia viene aportando fondos desde hace tres años por encima de lo que le corresponde. En las dos últimas temporadas transfirió 35 millones por año y un suplemento de 40 millones adicional”.
Según Banacloy, el problema de la falta de fondos del programa tiene que ver con que en la actualidad son muy pocos los productores que han adherido al Programa y aportan al Fondo Mixto (“no más de 5 mil hectáreas están aseguradas a través del Ente”), con la particularidad de que precisamente son los que se encuentran en zonas tradicionalmente castigadas por el granizo, con lo que la sustentabilidad del fondo es imposible. Desde la Fruticultura aseguran que están trabajando en un nuevo proyecto que permita redefinir y ampliar el Programa compensador para garantizar un Ente “que sea sustentable económicamente en el tiempo”.
El funcionario aseguró que la provincia se encuentra gestionando un crédito con Nación para cumplir con su compromiso con los productores que reclaman el pago del seguro: “Estimamos que la deuda está en torno del 55 millones de pesos y la provincia está dispuesta a tomar un crédito para cancelar estos compromisos”.
