Las exportaciones de carnes bovinas crecieron en julio 8 por ciento respecto al mes anterior, lo que representó 18.000 toneladas peso de ese producto, lo que equivale a más de 27 mil toneladas peso res.
El incremento registrado se debe principalmente a la comercialización de carnes congeladas con China, país que representó la mitad del volumen exportado durante ese mes y también, en menor proporción, a Israel, indicó el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas.
En sentido inverso, se registró una reducción en los embarques de carnes enfriadas, dado que no se sostuvo el nivel alcanzado por Chile, que en el mes anterior tocó el punto máximo de los últimos tres años; su caída compensó holgadamente el ligero aumento de la Unión Europea respecto del mes precedente.
En esa línea, China rompió un nuevo récord durante julio, con 9.200 toneladas, en los primeros siete meses de 2017, acumulando más de 47.000 toneladas que reportaron 192 millones de dólares.
El presidente del Consorcio de Exportaciones de Carnes Argentinas, Mario Ravettino, sostuvo que “si bien la Unión Europea es el principal destino en valor de nuestro país, China encabeza el ranking a nivel individual, superando a Alemania que tradicionalmente ocupó ese lugar".
Las exportaciones de carnes enfriadas han tenido un curso ascendente a lo largo de los primeros siete meses de 2017, sustentado en la recuperación del mercado chileno y en menor medida de la UE, por cuanto el mayor volumen embarcado se vio reducido por una baja en las cotizaciones.
“En la medida en que se consolide el promedio alcanzado, las exportaciones argentinas de carnes bovinas podrían llegar a 290.000 toneladas peso res, un logro relativo si se considera el promedio histórico de los embarques", indicó Ravettino a la vez que agregó que "por el momento, ni el mayor margen de competitividad de nuestros competidores ni la oferta ganadera disponible permiten esperar mejores resultados” indicó Ravettino.
Respecto al precio medio de las exportaciones, expresó que “hubo una variación positiva aunque poco relevante durante el mes de julio, vinculada a la mejora en las carnes enfriadas hacia la Unión Europea, por la incidencia de la cuota Hilton, pero ello fue atenuado por una mayor participación de las carnes congeladas de menor valor unitario”.
En julio de 2017, el valor total facturado en concepto de carnes bovinas fue de 111 millones de dólares, 7% mayor al del mes precedente.
Las exportaciones de menudencias tuvieron una tendencia opuesta, reflejando una baja: alcanzaron 7.2 miles de toneladas peso producto por valor de 16 millones de dólares, un 31% menor a las acumuladas en junio de 2017.