La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) redujo hoy la estimación de cosecha de soja en tres millones de toneladas con respecto a la proyección realizada por la entidad en septiembre de 2017 debido al déficit hídrico que afecta a gran parte de las zonas productivas y la situó en 51 millones de toneladas.
Al mismo tiempo, la entidad bursátil dio por finalizados los trabajos de siembra en todo el territorio nacional al cubrirse las 18 millones de hectáreas estimadas, 200.000 hectáreas menos que en la primera previsión de superficie realizada.
"A la fecha se da por concluida la siembra de soja a nivel nacional. Las perspectivas climáticas a corto plazo no prevén alivio efectivo en zonas comprometidas por estrés hídrico y es por ello que la proyección de producción en la campaña en curso se reduce un 5,5% en la relación a la proyección publicada a finales de septiembre del 2017, la cual fue de 54 millones de toneladas", indicaron desde la BCBA.
Según el informe semanal sobre estimaciones agrícolas, "gran parte del área implantada transita etapas críticas para la generación de rendimiento, sufriendo condiciones adversas en diferentes sectores del país".
Los últimos relevamientos realizados durante la semana detallaron que el 34,6% de los lotes se encuentra con una condición de cultivo de regular a mala y un 53% con una condición hídrica de regular a sequía, mientras que el 31,5% de los cuadros ya transita etapas de definición de rendimiento.
De concretarse el augurio de 51 millones de toneladas, la presente campaña se ubicaría como la peor en cinco ciclos, solo por encima de la de 2012/13, cuando la producción a nivel nacional fue de 48,5 millones de toneladas.
En el desglose de las principales zonas productoras, "amplios" sectores del Núcleo Norte y Núcleo Sur, regiones que en conjunto aportan más del 27,5 % del área sembrada a escala nacional, presentan "cuadros transitando etapas críticas bajo condiciones de estrés hídrico agravado por elevadas temperaturas máximas".
Similar escenario es relevado en importantes sectores del oeste, centro, sudeste y sudoeste de Buenos Aires, en donde se concentra otro 17,5 % de la actual estimación nacional de superficie destinada al cultivo, aseguraron desde la entidad.
Sobre el centro-norte de Córdoba también "se relevó una regular oferta hídrica en una gran cantidad de lotes de primera que transitan etapas críticas de diferenciación de vainas, mientras que el sur de la provincia una adecuada oferta hídrica mantiene una mejor condición de cultivo tanto en lotes de primera como de segunda".
Por otro lado, la siembra de maíz inició su etapa final al cubrir el 96,7% de las 5,4 millones de hectáreas proyectadas por la bolsa porteña, con un avance intersemanal de los trabajos de implantación de 4,3 puntos porcentuales.
La incorporación de cuadros del cereal con destino grano comercial se concentró en el norte del área agrícola nacional cuando "ya transitamos la última semana de ventana de siembra".
En paralelo, los lotes tempranos comienzan a transitar las últimas etapas reproductivas y se espera el inicio de la cosecha de los mismos durante las próximas semanas.
Por último, ya se trillaron 547.000 hectáreas de girasol, un 31,8% de las 1,75 millones de hectáreas sembradas, con un rendimiento promedio 21 quintales por hectárea que permitieron recolectar 1,15 millones de toneladas.
Desde la entidad, confían en que se cumplirá la meta proyectada de 3,6 millones de toneladas de producción total, cifra que de concretarse significaría un aumento del 9% con respecto a la campaña anterior.