Un nutrido grupo de agregados comerciales y funcionarios de los países que integran el G20, que confluirán a fines de noviembre en un nuevo encuentro a desarrollarse en Buenos Aires, fueron testigos directos en Expoagro del desarrollo que alcanzó el campo argentino. Todos coincidieron en que atender la demanda mundial de alimentos y cuidar el medio ambiente son temas imprescindibles en la agenda de la próxima cumbre.
Referentes de lugares tan disímiles como Estados Unidos, Alemania, Japón, Arabia, Corea del Sur, Australia y Brasil, entre otros, arribaron cerca del mediodía al predio ubicado en el kilómetro 225 de la Ruta 9. Con Santiago del Solar, jefe de Gabinete del Ministerio de Agroindustria, como anfitrión, la delegación recorrió las calles de Expoagro y asistieron a una muestra del potencial productivo argentino en el Tecnódromo.
La admiración por el desarrollo tecnológico de la maquinaria argentina fue moneda corriente en la apreciación de los extranjeros. Con la típica amabilidad japonesa, Go Tatsuya se maravilló de la extensión de los lotes de nuestra Pampa y bromeó al señalar que los lotes de su isla natal no tienen nada que envidiarles a los argentinos, salvo el tamaño. Más serio, indicó que las enormes producciones de soja y maíz de nuestro país son un aliciente a tener en cuenta en la cumbre de noviembre al analizar la problemática alimentaria internacional.
Miembro del Ministerio de Medioambiente, Agua y Agricultura de Arabia Saudí, Hussain Fahad Alajmi no ocultaba su impresión por el tamaño de la muestra y reveló que desconocía por completo el nivel de desarrollo agronómico alcanzado por nuestro país. “Me llevo la evidencia de que los argentinos trabajan arduamente para desarrollar a su país”, indicó. Más allá de las evidentes diferencias geográficas y geológicas, el árabe se esperanzó en poder sacar provecho de la experiencia argentina. Y advirtió que compartirá con los miembros del G20 la tecnología aplicada en nuestro país “que muchas naciones del planeta necesitan”.
Desde Sudáfrica, Alfred Sithow, funcionario del Ministerio de Agricultura y referente de todo el continente “negro”, remarcó la importancia de establecer un buen vínculo entre las tecnologías disponibles de ambos países. “Nos llevamos la seriedad con la que Argentina trata el tema de los suelos, imprescindible para mejorar la vida de los agricultores”, comentó. Tras asegurar que en el G20 se están abordando muy seriamente los temas de seguridad, alimentación, medio ambiente y desechos de comida, advirtió que “el mundo no puede seguir trabajando en agricultura sin la incorporación de tecnología. El cambio climático también nos genera la necesidad de innovar”. Y en ese sentido, lamentó que en Sudáfrica los jóvenes no se interesen en los menesteres rurales. “Tenemos la esperanza de que la implementación de tecnológicos en el campo impulse el interés de los jóvenes en la actividad agropecuaria”, dijo.
En tanto, Jong Jin Oh, subdirector de alimentos y granos del Ministerio de Agricultura sudcoreano, recordó que su país es un gigante industrial. No obstante, se sorprendió por el avance tecnológico en todo el arco de la producción agropecuaria argentina. “Aunque contamos con una tecnología muy desarrollada, el Ministerio de Agricultura promueve un nuevo tipo de agricultura con tecnologías actuales, similares a lo que veo aquí en Expoagro”, ilustró.