Se presenta a continuación la información estadística y proyecciones que proporciona el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos en su informe anual sobre Biocombustibles en Argentina. El 03 de Agosto de 2018, el USDA presentó este importante informe que fue preparado por Kenneth Joseph y aprobado por Lázaro Sandoval. Se trata de información muy relevante para nuestro país, ya que presenta la Hoja de Balance consolidada del etanol y biodiesel para el período 2009 a 2018 (estimado). Este artículo se enfocará sólo en el mercado de biodiesel, al que se agregarán datos de los años 2007 y 2008 hasta el presente, que habían sido publicados en informes anteriores de este organismo.
Se destacan los siguientes aspectos en base a la información presentada:
Dato N°1: La producción argentina de biodiesel 2018 caería un 15,3% frente al año 2017.
Los elevados aranceles que el Departamento de Comercio de los Estados Unidos impuso al biodiesel argentino, poniendo virtual bloqueo a las importaciones a nuestro país, desincentivaron la producción nacional haciendo caer notablemente las expectativas productivas para el año 2018. Cabe recordar que en su anterior informe de biocombustibles el USDA había estimado la producción de biodiesel para el presente año en 3.350 millones de litros, lo que de concretarse habría significado un aumento respecto al año 2017. Sin embargo, las reglas de juego cambiaron y, en el último informe, la proyección cayó sustancialmente a 2.760 millones de litros, esto es, casi 600 mil litros menos que en la estimación previa, y un 15,3% inferior a lo elaborado el año pasado.
Dato N°2: Las exportaciones de biodiesel de Argentina en 2018 disminuirían un 28% respecto al año pasado.
Naturalmente, el cierre del mercado estadounidense, país que hasta el año 2017 había sido el principal importador de biodiesel argentino, también trajo repercusiones por el lado de las exportaciones proyectadas para 2018. Otro factor que influyó en esta merma fue la determinación del gobierno argentino de aumentar las retenciones para el biodiesel del 8 al 15 por ciento, que se efectivizaron en julio del presente año (la alícuota efectiva es del 13,04%), en tanto que algunos analistas no descartan que el gobierno quiera eliminar el diferencial de alícuotas de exportación entre el biodiesel y el aceite de soja, que es su principal insumo.
Frente a este panorama, el USDA recortó sus previsiones para las exportaciones argentinas del biocombustible a 1.350 millones de litros, lo que implica una caída del 28% en relación al año previo, o lo que es lo mismo, una disminución de 525 millones de litros exportados.
Pese a estos desalentadores pronósticos, en los primeros siete meses del año se registró un buen ritmo de exportaciones a la Unión Europea, gracias a la reapertura de este importante mercado a fines de 2017. El USDA afirma que hay preocupaciones de que las mismas comiencen a caer luego de los meses de agosto y septiembre, ya que a comienzos de este año la Unión ha vuelto a iniciar investigaciones anti-subsidios contra el biodiesel argentino.
Datos N°3: El consumo doméstico de biodiesel alcanzaría el récord histórico de 1.480 litros en 2018, y la tasa de corte superaría –por primera vez- el 10% obligatorio.
Las menores exportaciones esperadas se ven parcialmente amortiguadas por un consumo interno de biodiesel que sería el mayor registrado históricamente en nuestro país. El mismo ascendería un 10,8% con respecto al año pasado, ubicándose en 1.480 millones de litros.
Esto permite que la tasa de corte de gasoil con biodiesel (considerando la mezcla que se utiliza en red vial más agricultura) ascienda en el 2018 a 10,3%. De este modo, se cumpliría por primera vez en la práctica la tasa obligatoria de corte del 10% que se había establecido en el año 2014.
El USDA espera que la tasa de corte obligatoria se mantenga en 10%, a pesar de que por el lado de la producción se solicita que la misma sea elevada al 12%, el mismo nivel que rige para el bioetanol.
La Bolsa de Comercio de Rosario, 2 meses atrás, solicitó el aumento del corte obligatorio ante la dificultad para seguir exportando a corto plazo cantidades importantes de biodiesel, tomando en cuenta que: a) el mercado de EE.UU. está cerrado, b) es probable que Europa aplique una nueva sanción de carácter proteccionista a Argentina, y c) el aumento en los derechos de exportación deterioró los márgenes de la exportación. Por ello, para no afectar el nivel de actividad y empleo de la industria de biodiesel, solicitó dos medidas principales:
- Aumentar el corte obligatorio del 10% al 15%. Posteriormente se podría avanzar hasta el 20%.
- Intensificar el uso de biodiesel en los equipos de transporte, de generación eléctrica existentes y en otros segmentos de consumo de gasoil mineral –de manera voluntaria o por vía de un aumento del mandato respectivo-.
Dato N°4: En 2018 se destinaría una mayor proporción de la producción de biodiesel al consumo interno que a las exportaciones.
Como resultado de todo lo expuesto anteriormente, el 2018 presentaría una importante diferencia respecto a los años anteriores: de la producción nacional, se destinaría un mayor porcentaje al mercado doméstico que a las ventas externas. En los registros, que datan desde 2007, esto sólo había ocurrido previamente en el año 2015, cuando las exportaciones habían sido particularmente bajas por el cierre del mercado de la Unión Europea a fines de 2013, que por entonces era nuestro principal comprador.
En conclusión, el futuro de la producción y exportación de biodiesel por parte de nuestro país dependerá no sólo de factores externos, como las decisiones que tomen en materia de aranceles tanto Estados Unidos como así también la Unión Europea, sino además de factores internos, como los propios derechos de exportación del biocombustible, la tasa de corte obligatoria (y su efectivo cumplimiento), los precios internos, entre otras cuestiones. Habrá que monitorear cómo evolucionan estos dos frentes para que el mercado argentino de biodiesel pueda permanecer a bordo del tren de crecimiento al que logró subirse en la última década.