Sobre los precios y el debilitamiento que se venía viendo, habló con Radio Campo -por Radio Colonia- el analista de Mercados de la Corredora Grassi, Ariel Tejera. El especialista explicó que sobre todo esto se percibía en la soja, que se encontró bastante deprimida.
Eso se daba en el marco del conflicto comercial entre China y los Estados Unidos, y a eso se sumó la peste porcina africana, que empezó a debilitar la demanda. Eso generó una ecuación de fuertes caídas de los precios a nivel internacional, que fueron copiados a nivel local también, en medio de un año con una buena cosecha de soja.
Tejera indicó que también fue un muy buen año para el maíz, que sorprendió a todos, con una campaña que empezó con bastante agua en diferentes puntos de la Argentina, y algunos lotes que requirieron de la resiembra.
Sin embargo fue eso, la buena humedad y el clima, que llevaron a un año de rindes récords. Aún así, insiste en que falta recoger la mitad de la producción, y quedan por ingresar unos 25 millones de toneladas en el país.
Cuando eso se dé va a estar entrando además la cosecha de segunda de Brasil, que todavía tiene un aporte de 75 millones de toneladas para este año, así que prevén unos meses cargados de oferta en maíz.
“Vemos un mercado local que, si bien fue recuperándose al compás de lo que pasaba en los Estados Unidos en materia del clima, generó impulsos en los precios y una fuerte recomposición, sobre todo en maíz”, dijo.
Sobre el final, explicó que en el mercado local se fueron escalando posiciones pero lo que se vio es que se va apagando ese impulso, y eso está vinculado al ingreso de la cosecha sudamericana que “viene con todo este año”.
