El gobernador electo de la provincia de Buenos Aires por el Frente de Todos, Axel Kicillof, aseguró hoy que tuvo "una breve charla" con la mandataria provincial saliente, María Eugenia Vidal, quien "se puso a disposición para la transición" y adelantó que se reunirán esta semana.
Kicillof además remarcó que el suyo será un "gobierno de gestión y no de marketing", durante la conferencia de prensa que brindó en el Frente Nacional Peronista, en la ciudad de La Plata, junto a la vicegobernadora electa Verónica Magario.
Al referirse a la gestión que ambos deberán encarar a partir del próximo 10 de diciembre, el ex economista aclaró: "Para nosotros es una enorme responsabilidad y orgullo", al tiempo que advirtió que "en cuatro años" se ha producido "una situación de tierra arrasada".
Haciendo un punteo por las distintas áreas de gobierno, Kicillof remarcó que los números son "todos muy malos y muy preocupantes a nivel nacional y a nivel provincial".
Por eso, si bien aclaró que no van a "cogobernar la provincia", Kicillof reclamó comenzar un trabajo de transición entre los equipos técnicos del FdT y miembros del gabinete provincial.
El flamante gobernador electo quiere realizar "una radiografía" que les permita hacer un diagnóstico preciso de la situación en la que se encuentran las distintas áreas de gobierno, para poder fijar "las prioridades de gestión" antes de asumir el cargo.
Poco antes, la vicegobernadora electa dijo que "hay que terminar con esta grieta, esta pelea y odios que separan a los bonaerenses y a los argentinos".
Además de Kicillof y Magario estuvieron presentes en la conferencia de prensa, que brindaron en la sede del Frente Nacional Peronista, ubicado sobre la calle 10 al 1084, en la ciudad de La Plata, un grupo de intendentes y diputados provinciales.