En plena pandemia de coronavirus, San Luis se blindó para todos. No importa que los productores agropecuarios y la cadena agroindustrial en general tengan una excepción que les permite circular para continuar con sus trabajos. A San Luis no entran y de San Luis no salen. Casi que por San Luis tampoco circulan. Así grafican lo que están viviendo los productores cordobeses que alquilan o son propietarios de campos en la provincia vecina y no pueden seguir, monitorear, vacunar ni cosechar.
En diálogo con Radiocampo -por Radio Colonia- Malcom Azcurra, productor agropecuario cordobés con campo en San Luis, explica que su explotación es netamente ganadera y no poder entrar al campo limita su plan de vacunación, por lo que las consecuencias en el corto plazo será una suba en el índice de mortalidad de los animales. Es decir, tienen más probabilidad de morir porque no pueden ser vacunados en tiempo y forma.
A la vez, cuenta, “también estamos impedidos de llegar al campo para aprovisionar a nuestros trabajadores con los elementos de seguridad y de higiene que necesitamos que tengan para no contraer coronavirus”. Ni eso pueden. Y en eso coincide Franco Mugnaini, también cordobés y propietario de un campo en la zona de Merlo, San Luis: “Ni siquiera pudimos llevar mercadería a los empleados del campo, además de no poder ingresar los administradores ni agrónomos a hacer el seguimiento habitual”.
De izquierda a derecha: Malcom Azcurra y Franco Mugnaini, productores cordobeses con campo en San Luis.
En su caso, dice, lo que siente es básicamente “desesperación”. Quedan días, queda una semana, relata, para perder la cosecha de soja. “Desde el inicio de la cuarentena no podemos cruzar ni los equipos ni las máquinas de cosecha. Ya pedí todos los permisos que publicó la provincia pero nos denegaron todos. Ahora nos quedan seis o siete días para empezar a perder las casi 600 hectáreas de soja que tenemos ahí, porque se trata de la cosecha del cereal, que no puede esperar a que se solucione la pandemia por su período biológico”, concluye.
Wiliam Palandri es otro de los productores que no puede llegar al campo en San Luis: "Esto no termina en poco tiempo, viene para largo y no sabemos qué vamos a hacer si no podemos seguir produciendo. Es desesperante y un disparate".
Los productores llevaron sus reclamos a Cartez, la entidad que preside Javier Rotondo y que ya hizo el pedido extensivo tanto a CRA (la gremial que los nuclea a nivel nacional) como al propio Ministerio de Agricultura y Ganadería cordobés que lidera Sergio Busso, desde donde esperan poder destrabar las negociaciones con el par puntano, Juan Lavandeira que, por ahora, según confiaron fuentes serranas a Agrolink, no atiende otro teléfono que no sea el del funcionario de Córdoba.
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