La Bolsa de Cereales de Entre Ríos confirmó que las industrias aceiteras comenzaron a rechazar granos de soja que se encuentran en mal estado y advirtió que el stock disponible en la plaza local es "muy escaso".
En un informe, la entidad bursátil se refirió de manera específica a la empresa Entre Ríos Crushing, una aceitera ubicada en el Parque Industrial de Gualeguaychú, en el que consignó que "las pérdidas en la cosecha que tuvieron los productores se trasladaron directamente al rubro" industrial.
Al inicio de la cosecha, el grano de soja que ingresó en la planta presentaba un alto porcentaje de "grano verde", superior al porcentaje de tolerancia que es del 10%, por lo que se realizaron rebajas en el precio.
El grano verde se produce en situaciones de estrés térmico o hídrico, donde la clorofila produce problemas en la obtención de aceites de calidad, encareciendo el proceso industrial.
En tanto, tras las precipitaciones de mediados de abril, se retomó la cosecha, pero entre la soja que ingresó a las industrias se encontró "entre un 20 y 40% de grano dañado, por lo que se rechazó la mercadería ya que no se puede procesar", explicó la Bolsa de Cereales.
Entre los granos dañados se incluyen granos brotados, fermentados y ardidos por calor y podridos, y se produce por la demora en la cosecha, por elevada humedad, o por incrementos en el nivel de enfermedades, entre otras causas.
Este tipo de grano de soja produce aceite con altos niveles de acidez y lo excluye de la condición comercial.
En el informe, la Bolsa entrerriana señaló que el elevado porcentaje de grano verde ocasionó que la producción de aceite se limite a la industria del biodiesel y no a la de consumo humano.
Por esos motivos, consideró que la "peor seca en la región en 90 años" y los excesos de lluvias que hicieron que en Entre Ríos se pierda "un 65% de la cosecha" de soja y maíz, estimado en US$ 150 millones "también afectó al rubro" industrial.
"No solo en la calidad sino también en la cantidad de soja que se produjo, por lo que la materia prima disponible para procesar este año sea muy escasa", agregó.
En la provincia se cosechó poco más del 75% de las 917.000 hectáreas de soja de primera, con un rinde de 1.100 kilos por hectárea, 1.300 menos que el promedio del último lustro, y alrededor de 10 millones de toneladas de soja menos que en la temporada pasada.