Mediante una resolución publicada hoy en el Boletín Oficial, el secretario de Alimentos y Bioeconomía, Andrés Murchison, aprobó el Protocolo de Calidad para Mosto concentrado de uva, uno de los subproductos de la industria vitivinícola.
Las exportaciones de mosto en 2017 cayeron respecto del año anterior en más del 40%, desde 104.121 toneladas a sólo 61.656 toneladas, pero aún así la Argentina sigue siendo uno de los países líderes en el mercado internacional de ese producto.
El protocolo de calidad, que es de cumplimiento voluntario para las empresas que deseen aplicarlo, apunta a "mantener esa posición y continuar liderando en los mercados", se explicó oficialmente.
"La Industria Argentina del JUC debe sostener la calidad de los productos, para cumplir con las especificaciones técnicas requeridas, las cuales cada día se tornan más exigentes", indicó el documento.
El protocolo recordó que debido al bajo precio que tenía el vino en la década de los '80, hubo una diversificación de los productos derivados de la uva, dando lugar a la elaboración de mosto.
Mendoza y San Juan, añadió, representan el 96% de la oferta de este derivado del procesamiento de uvas, que tiene gran importancia como aditivo en muchos productos de consumo masivo, como alimentos especiales para niños, caramelos, gelatinas, jaleas, productos farmacéuticos y frutas en almíbar.
"El JUC se define legalmente como el jugo obtenido del mosto de uva en sus diversos grados de concentración mediante procesos térmicos al vacío o al aire libre, sin haber sufrido caramelización sensible", define el documento que fija los parámetros de calidad óptimos para la elaboración de dicho producto.
Al respecto, el trabajo definió que "el mosto concentrado de uva debe prepararse a partir del jugo obtenido de uva sana y apropiadamente madura, sin la adición de otras especies de frutas u organismos genéticamente modificados".
