
Desde la provincia de Santa Fe y, a través de un comunicado, la Sociedad Rural de Rosario levantó la voz para expresar su profunda "alarma" ante la coyuntura que vive el sector agropecuario. Es que la entidad advirtió que la escalada de las condiciones económicas está comprometiendo seriamente la subsistencia de las explotaciones rurales.
En este marco, los productores santafesinos, a través de su representación, señalan una serie de medidas que asfixian su rentabilidad. Entre ellas, resalta el incremento del 13,51% en el impuesto inmobiliario rural, vigente desde las cuotas 4 a 6 (Decreto 1434/25), y el gravamen adicional generado por el aumento en Ingresos Brutos para los servicios ligados al campo. Además, consideran que la figura del “Gran Propietario Rural” es injusta y debe ser derogada.
Por otra parte, la cuestión del combustible es otro punto de fricción. El precio del gasoil ha experimentó un alza de entre 10% y 12% en lo que va del año, lo que no solo incrementa el costo de operación de la maquinaria agrícola, sino que también repercute en las tasas comunales, muchas de las cuales se calculan en función de este insumo. La distorsión impositiva del IVA también genera un fuerte descontento: el sector compra insumos con un 21% de IVA, pero sus productos se venden con una alícuota del 10,5%, lo que, según denuncian, les genera una pérdida de capital de trabajo y una "financiación forzada" al Estado sin compensación.
Pero las demandas no terminan ahí. La Sociedad Rural urge a la eliminación de los anticipos del impuesto a las ganancias y se opone con firmeza al restablecimiento de las retenciones a la soja (33%) y al maíz (12%). Argumentan que, con los precios y costos actuales, más del 80% de la superficie cultivable operaría con márgenes negativos, haciendo insostenible la producción.
Finalmente, el comunicado aborda la seguridad rural, un tema de creciente preocupación. Los productores piden la supresión del cobro de patente a la maquinaria agrícola (manteniendo su registro) y denuncian un aumento de la inseguridad, afirmando que "Vivimos y trabajamos en territorio liberado". Por ello, instan a acciones concretas de la Justicia y el Gobierno. El documento cierra con un llamado a una reforma tributaria integral que aligere la presión sobre la producción y que permita una reactivación económica desde la base, señalando que "el ajuste no puede seguir cayendo sobre los hombros de los santafesinos mientras la política no reduce sus gastos improductivos”.