Dos funcionarios de la Oficina del Representante Comercial estadounidense (USTR, por sus siglas en inglés) realizaban gestiones esta semana en la Argentina para promover una mayor utilización del Sistema Generalizado de Preferencias (SGP), que permite el ingreso de mercaderías locales libres de aranceles a los Estados Unidos.
Erland Herfindahl, subsecretario para el sistema SGP, y Eleanor Shea, directora del USTR para los países del Mercosur, mantuvieron reuniones con cámaras empresarias y con los secretarios de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, Horacio Reyser, y Comercio, Marisa Bircher.
El reingreso de la Argentina al Sistema se produjo en diciembre pasado, luego de cinco años de suspensión, y beneficia a más de 3.600 posiciones arancelarias incluidos productos de economías regionales como vinos, artículos de confitería sin cacao, conservas de carne, aceite de oliva, quesos y frutillas, entre otros.
Durante las reuniones bilaterales, Reyser destacó que “en enero-agosto las exportaciones argentinas a Estados Unidos vía SGP, es decir con arancel cero, sumaron unos u$s 200 millones”, según revelaron a Télam fuentes del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Pero este monto, dijo el funcionario, “representa apenas 6% de los envíos a EE.UU. (u$s 3.000 millones en total) y sólo la mitad de las exportaciones que se beneficiaron en 2012, cuando llegaron a u$s 400 millones”.
Los análisis realizados en la Cancillería revelaron que en el transcurso de 2018 hubo u$s 150 millones de ventas a Estados Unidos que podrían haber reclamado el arancel cero y no lo hicieron: “hay un monto que se pagó por no poder utilizar correctamente el sistema”, lamentó Reyser.
Entre los motivos detectados se indicó que el importador de EE.UU. no realizó la inscripción correcta de la operación como beneficiaria del SGP y que el exportador argentino no lo controló, o bien, se desconocen aún las características del sistema.
“Se aprovechan sólo 450 posiciones arancelarias, un 13% del total incluido, por lo cual desde la Cancillería y los ministerios de Producción y de Agroindustria se trabaja para determinar si la subutilización se debe a la ausencia de oferta exportable, falta de competitividad o deficiente desarrollo del mercado”, sostuvo Reyser.
Por su parte, Bircher recordó -durante las reuniones con empresarios- que existen acuerdos de SGP no sólo con Estados Unidos, sino también con otros mercados como Australia, Nueva Zelanda, Rusia, Suiza, Noruega, Japón, Kazajistán, Armenia y Bioelorusia.
“Tenemos un número significativo de oportunidades que hay que seguir aprovechando, para lo cual la Cancillería elaboró una guía de SGP para exportadores que está en el sitio web de Argentina Trade Net, y estamos realizando acciones de promoción en todas las provincias y municipios”, destacó Bircher.
Las facilidades del SGP contribuyen a una mejor relación comercial con beneficio mutuo y la decisión del gobierno de EE.UU. constituye un reconocimiento de los esfuerzos de la Argentina para organizar y desarrollar su economía”, resaltó Reyser.
En cuanto a la persistencia de otras restricciones, como la prohibición de ingreso al mercado estadounidense que pesa sobre los biocombustibles argentinos, el funcionario afirmó que “trabajamos en otras cuestiones para el acceso al mercado mutuo de ambos países y esperamos que puedan quedar resueltas prontamente”.