El presidente de la división Protección de Cultivos de Basf, Markus Heldt, elogió el cambio de política económica en la Argentina porque, dijo, permitirá reflotar y sumar proyectos de inversión de la compañía alemana.
En medio de la carrera por adquisiciones y megafusiones entre las firmas globales de tecnología –como la nueva oferta de Bayer por Monsanto, la integración de Dupont y Dow en Estados Unidos, la compra de Syngenta, por parte de ChemChina, o el pase de Nidera a la china Cofco–, Heldt y otros directivos dijeron que Basf no está en esa línea. En cambio, confían en que sus innovaciones en agro llevarán a Basf a incrementar en tres mil millones de euros su facturación de aquí a 2025.
La compañía está enfocada en inminentes lanzamientos de fungicidas, tras la reciente inauguración de su centro de investigación para inoculantes biológicos.
Durante una entrevista que concedió a Agrovoz , junto a otros medios de América latina, Heldt dijo: "Los últimos dos años fueron muy difíciles para Argentina, para nuestro negocio, pero vemos ahora una cooperación muy buena; se tiene voluntad de inversión, los agricultores tienen una actitud más positiva y el nuevo Gobierno ha hecho un buen trabajo de atmósfera de confianza".
Consideró que para las ventas de Basf, Argentina "es top 10", mientras que como productor es uno de los top cinco del mundo. "Queremos invertir en el campo, en recursos humanos y también decidir si necesitamos activos de producción en la Argentina. Hasta el momento, muchos de los productos vienen de Brasil", dijo.