El Gobierno Nacional insiste en su plan de achicar la estructura del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). En diversas ocasiones, el Ejecutivo ha señalado que el organismo es demasiado grande. Incluso, el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, sugirió la posibilidad de adoptar un modelo de "chacras" similar al de Aapresid.
Ante este avance del gobierno sobre la institución y su forma de gestión, diversas organizaciones rurales han expresado su desacuerdo. En este contexto, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) manifestó su inquietud frente a las especulaciones sobre una posible reorganización del INTA.
"No negamos la necesidad de una puesta a punto, pero advertimos que cualquier modificación debe ser planificada con inteligencia, diálogo y una visión a largo plazo", afirmó la entidad que representa a productores de La Pampa y Buenos Aires.
Al mismo tiempo, Carbap enfatizó que la transformación del INTA debe orientarse a fortalecer su rol estratégico y no a "debilitarlo". Además, la confederación subrayó la autonomía del instituto, su extensa red territorial y su capacidad para la innovación y la transferencia de tecnología.
Sturzenegger también se refirió a la gobernanza del INTA, que actualmente es un ente autárquico y cuenta con la participación del sector productivo en la toma de decisiones. "Me parece que tenemos que plantearnos la estructura de gobernanza, pero esto no va en contra de nadie, simplemente tiene sentido evaluar qué es lo que está haciendo el INTA y tratar de mejorarlo. De esto se trata", expresó el ministro en A24.
Carbap no tardó en replicar: "La autarquía, la gobernanza participativa y la red de Centros Regionales son pilares que han convertido al INTA en un referente nacional e internacional. Esos logros no pueden ser puestos en riesgo por reformas precipitadas o unilaterales".
Las objeciones sobre los recortes en el instituto no son recientes. Federación Agraria y CRA, entre otras organizaciones, ya habían manifestado su postura al Gobierno.
"Es el lugar donde obtenemos información, formación, capacitación, y podemos mejorar nuestra eficiencia y seguir siendo productores", declaró la presidenta de la Federación Agraria, Andrea Sarnari, añadiendo que la función del INTA es fundamental para el desarrollo de la producción agropecuaria.
Por su parte, Carbap sentenció: "Reafirmamos nuestro compromiso con una modernización profunda, pero basada en el consenso y la participación activa del sector. No se trata de aplicar la motosierra del desmantelamiento, sino el bisturí de una transformación seria y responsable que prepare al INTA para los próximos 50 años".
