En el marco del seminario Agrotendencias, que se realizó ayer en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, organizado por la Federación de Acopiadores, el especialista en agroclimatología de la entidad, Eduardo Sierra brindó su pronóstico sobre el escenario climático que se avecina para la campaña 2023-2024.
Según sus observaciones, se anticipa un escenario difícil aunque se haya declarado el inminente ingreso del fenómeno de “El Niño”.
Los campos necesitan lluvia y humedad en los perfiles ya. “Hay indicadores que muestran que está ingresando El Niño, aunque el Océano Antártico está frío y eso juega en contra. Eso hace atemperar a El Niño, porque los vientos polares desfavorecen”, remarcó Sierra.
“Todos quieren que una vez declarado El Niño empiece a llover. Pero no es así. Dependen de los vientos alisios. Es difícil lograr que las lluvias vengan en la cantidad que se necesita", asegura Sierra.
Leé también: La Bolsa de Cereales de Buenos Aires prevé una producción de trigo de 18 millones de toneladas
"No va a ser un Niño inundante, por lo menos no por ahora, quizás sí en febrero o marzo. Ahora estamos en una transición”, explicó el referente en clima de la BCBA. No obstante, señaló que “el sudeste triguero argentino es el único que se puede decir que está bien, con buenos perfiles hídricos”.
Para el experto, en mayo, las condiciones de precipitaciones no van a ser de las mejores, pero en junio las lluvias van a llegar en un momento clave mejorando las condiciones de humedad, lo que permitiría desarrollar una mejor siembra.
📢Lanzamiento de #CampañaFina2324 #Agrotendencias 2023
Eduardo Sierra, Esp. en Agroclimatología, presentó el escenario climático. #clima
🗨️El estado de “La Niña” que continuó durante la temporada 22/23 en gran parte del país, evolucionará hacia un “El Niño” en la primavera. pic.twitter.com/rAboq2GnkM
— Bolsa de Cereales ETyM (@BolsadeC_ETyM) May 16, 2023
Un dato muy preocupante es la escasez de precipitaciones en la zona núcleo agrícola. ¿A qué se debe esto? "La construcción de la Hidrovía puede haber sido un factor disparador para que la zona núcleo parezca haber dejado de ser la mejor zona productiva. ¿Y si dejó de serlo?", hipotetizó Sierra.
En resumen. “Estamos en una campaña que nos va a hacer sufrir. La potencialidad es alcanzable pero hay que trabajar bien. No esperemos que porque se declaró El Niño sea un año de inundaciones. Estamos en un año de transición luego de tres Niñas consecutivas. Tenemos que aprender a trabajar en años donde no habrá excesos hídricos”, finalizó.