El negocio agropecuario local está sufriendo una de las peores sequías en 40 años; la región centro de la Argentina sigue esperando las lluvias que lamentablemente no llegan, por lo que semana a semana se cortan las estimaciones de producción de soja y maíz.
En este contexto, la asociación de productores agropecuarios CREA realizó un relevamiento en el que remarca que como consecuencia de esta situación los agricultores perderán en esta campaña alrededor de u$s2.150 millones.
"En lo inmediato, la actividad agrícola está en momentos claves para la definición de rendimientos, lo cual determinará el nivel de pérdidas final para la cosecha de gruesa, y por ende, su impacto en la cadena y el país. Las ganaderías de carne y de leche, si bien ya están condicionando sus decisiones por la seca, probablemente sufran los mayores impactos en el mediano plazo. Los impactos productivos de la sequía, además de generar complicaciones económicas, financieras y anímicas a los productores, afectarán directa o indirectamente las economías locales", explican desde CREA.
En combinación con la sequía, el aumento de los precios de soja y maíz y la reciente evolución del tipo de cambio están generando impactos económicos variados dependiendo de la producción. En agricultura, los cambios registrados contribuirán a atenuar la caída del valor bruto de la producción y la pérdida de los productores.
Así, según el Radar Agrícola (herramienta para cuantificar estado de resultados en todos los departamentos agrícolas de Argentina), ante una caída del 10% en la producción total de granos no se afectarían los ingresos brutos totales respecto a lo estimado a inicio de campaña, mientras que ante el escenario más probable de 15% a 20% de mermas de producción se perderían 2.150 millones de dólares.
A escala de productor, quienes tengan posibilidad aún de capturar los precios actuales podrán mitigar los efectos de la caída de rendimientos.
Por su parte, para la ganadería de carne y leche los efectos de las variaciones en precios y tipo de cambio son negativos, dado que la sequía aumenta la necesidad de suplementación con grano y esta tiene un costo de 9% a 13% mayor.
Por lo pronto, se estima que hay productores ganaderos CREA que están adelantando los destetes y, eventualmente, adelantando las ventas de la zafra.
Finalmente, para la lechería, el 52% de las regiones CREA lecheras muestran niveles de producción de silo regular (además de la caída en producción de pasturas).