El día de los Bosques se celebra anualmente el 21 de marzo, la elección de esta fecha tiene como fin celebrar la importancia de todos los tipos de bosques y árboles en general.
El primer Día de los Bosques se celebró oficialmente en 2013, con el objetivo de sensibilizar sobre la importancia de bosque y destacando desde entonces su importancia crítica en la salud del planeta, la biodiversidad y el bienestar humano, con actividades que incluyen campañas de reforestación y sensibilización.
Los bosques cubren un tercio de la superficie terrestre del planeta y biológicamente, son los ecosistemas más diversos. En ellos se encuentra más del 80% de las especies animales y vegetales. Cumplen, además, con una función esencial para la supervivencia: son vitales para el suministro de agua; influyen en cómo y dónde cae la lluvia y filtran y limpian el agua. Es por ello que al proteger los bosques, protegemos también el agua.
Los ecosistemas boscosos brindan refugio, trabajo y seguridad a 1.600 millones de personas que dependen directamente de los árboles para su sustento. También participan en la lucha contra el cambio climático: los bosques son uno de los sistemas naturales de captación y almacenamiento de carbono más eficaces y eficientes en función de los costos.
Fibras textiles, bioplásticos, aceites esenciales, nanocelulosa, múltiples papeles y embalajes, bioenergía, construcción con madera, resinas, taninos, muebles y hasta productos farmacéuticos son productos derivados de los bosques. Sin dudas, los avances en la biotecnología, la genómica, la bioinformática, la nanotecnología, la robótica, la inteligencia artificial, la tecnología de la información -entre otros- y su aplicación en los procesos productivos e industriales están intensificando los desarrollos de nuevos bioproductos, biomateriales y bioinsumos que contribuirán decisivamente a la seguridad alimentaria, la salud humana, la reducción de desechos, la calidad del hábitat, y la sustitución creciente de productos no renovables por aquellos renovables y de baja huella de carbono.
Las nuevas tecnologías permiten, además, mejorar la sostenibilidad de nuestros bosques a través del monitoreo y gestión con sistemas de información satelital que permiten no solo colaborar a la detección temprana de incendios, sino, además, hacer control de deforestación y gestión de carbono, biodiversidad, suelo y agua.
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Argentina en el Día de los Bosques
“Nuestro país tiene un patrimonio rico en bosques y plantaciones. El sector forestal de argentina involucra a 1,3 millones de hectáreas de plantaciones forestales; 55 millones de bosques nativos, incluye a 13.000 productores forestales y más de 6.000 empresas. Emplea en forma directa y formalmente a más de 100.000 personas y exporta alrededor de 700 millones de dólares anuales y, con el marco jurídico que lo respalde, es un sector que puede atraer inversiones que dupliquen la producción y el empleo y triplique las exportaciones. Las nuevas tecnologías aplicadas a la gestión y al desarrollo de nuevos productos hacen que el sector no tenga techo de crecimiento” explica Claudia Peirano, directora ejecutiva de AFoA.
Por eso, este 2024 celebramos a la innovación como el eje conceptual del Día Internacional de los Bosques para adentrarse especialmente en el fascinante mundo de los bosques y plantaciones forestales. Las nuevas tecnologías permiten no solo pensar en nuevos bioinsumos, sino, además, en mejorar sensiblemente los sistemas de gestión sostenible de bosques, la productividad, la prevención y el monitoreo. Herramientas que auguran más posibilidades de un futuro sostenible para los bosques nativos y plantaciones forestales. Y nuevas soluciones para un mundo mejor.
Bosques de Argentina
En nuestro país los bosques más visitados son los de la Patagonia. Los Bosques Patagónicos constituyen una delgada franja boscosa que se extiende desde el norte de la provincia del Neuquén hasta Tierra del Fuego y la Isla de los Estados. La flora presente en esta ecorregión posee parientes en Australia, Nueva Zelanda y la Antártida debido a la unión que hubo en el pasado de las masas continentales. También se los llama Bosques Subantárticos, y albergan especies como la lenga, el ñire, el arrayán y el alerce.
En las áreas protegidas de Argentina se conservan en su estado natural y está prohibida toda explotación económica con excepción de la vinculada al turismo, que se ejerce de manera sostenible y con sujeción a las reglamentaciones de la autoridad de aplicación.
