Ganadería

El consumo de carne vacuna en Argentina vuelve a superar los 50 kilos por habitante

En el último año móvil, cada argentino comió en promedio 50,24 kilos de carne vacuna, un 5,6% más que en 2024. La caída de exportaciones y la estabilidad en la faena impulsaron la oferta interna.

En los últimos doce meses a junio de 2025, el consumo de carne vacuna en Argentina alcanzó los 50,24 kilos por habitante, lo que representa un incremento del 5,6% frente al mismo período del año anterior, según datos de la Secretaría de Agricultura. Este repunte se explica por una menor exportación y la estabilidad en la faena, lo que dejó más producto disponible para el mercado interno. En julio, además, el precio del asado registró una baja.

En ese mismo período, el consumo total de carnes —bovina, aviar y porcina— fue de 114,06 kilos por persona, un 4,6% más que en 2024. La carne porcina se ubicó en 17,92 kilos per cápita (7,7% de incremento) y la aviar en 45,90 kilos (2,4% más).

En los primeros seis meses del año, las exportaciones de carne vacuna cayeron un 16% interanual. Paralelamente, la faena se mantuvo estable ya que en julio se registraron 1.244.608 cabezas, un 10% más que en junio, con aumentos del 12% en novillitos y del 13% en vaquillonas, ambas categorías destinadas principalmente al consumo interno. En el acumulado enero-julio, el total faenado fue de 7,8 millones de cabezas, prácticamente sin cambios frente a igual período de 2024.

Evolución de precios

Según el relevamiento del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), en julio los precios de la carne vacuna subieron un 1,3% respecto de junio. Entre los cortes con mayores incrementos se destacaron la falda (3,1%), la picada común y la carnaza común (2,9%), y el peceto (2,6%). En contrapartida, el matambre (1,5%), el asado de tira (0,13%) y el cuadril (0,12%) mostraron bajas.

En lo que va de 2025, la carne vacuna acumula una suba del 31,2%, frente a una inflación general del 15% hasta junio según el Indec. En la comparación interanual, el aumento es del 58,2%. Los mayores ajustes se dieron en febrero (10%), marzo (7%) y abril (4%), lo que reflejó la actualización de precios tras un período de retraso.

En cuanto a otras proteínas, el pollo fresco aumentó un 4,4% en julio y un 25% en el acumulado anual, mientras que el pechito de cerdo bajó 0,4% en el mes pero registra una suba del 8% en lo que va de 2025, lo que explica su crecimiento en el consumo.

Contexto histórico y perspectiva

En la década de 1960, el consumo de carne vacuna en Argentina rondaba los 82 kilos por habitante. En los años 80 bajó a 78 kilos, en los 90 a 70 kilos y en 2010 a 57 kilos. En 2020, en plena pandemia, se ubicó en 50 kilos y en 2024 descendió a un mínimo histórico de 42 kilos.

Para los próximos meses, se espera que los precios se mantengan estables en las categorías de consumo interno durante agosto, septiembre y octubre. Sin embargo, el novillo podría registrar variaciones ante un posible aumento de la demanda de exportación, impulsada por la mejora del tipo de cambio y la reducción de 1,7 puntos porcentuales en las retenciones anunciada por el Gobierno durante la última Rural de Palermo.

 

ETIQUETAS