En medio de la incertidumbre comercial y el final de cosecha para las principales variedades de pera en la región, ayer se conoció el valor de referencia –que fijó la Mesa de Contractualización Frutícola provincial– para la temporada 2016/2017.
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Según se informó, el precio es de 34 centavos de dólar el kilo de fruta fresca, pera y manzana, para su comercialización.
[/button]Se trata de un valor que surge de un estudio de los costos de producción, en base a un análisis e informe realizados por especialistas del INTA y de la Secretaría de Fruticultura provincial.
Se estima que si los productores venden la fruta a ese valor podrían cubrir el costo de producción. Sin la participación de los referentes de las cámaras empresarias, CAFI y Cinex, los integrantes de la Mesa –conformada por legisladores, además de los representantes directos de la actividad y Provincia– establecieron en 34 centavos de dólar de fruta fresca el precio de la pera y la manzana, por kilo, “puesta en báscula y objeto de contratación” para la actual campaña, informaron dirigentes del sector productor.
La flamante conducción de la Federación de Productores exhibió ayer los números, en medio de un encuentro que formalizaron el lunes con el ministro de Agricultura y Ganadería, Alberto Diomedi.
Si bien en su agenda se encuentran numerosos puntos por resolver, ayer el titular de la Cámara de Fernández Oro, Carlos Zanardi, mencionó que se logró avanzar con referentes del gobierno nacional en la región, para “establecer una agenda de temas a tratar”, y se pretende lograr también una audiencia con el mandatario provincial, Alberto Weretilneck.
La nueva dirigencia del sector primario entregó un petitorio en referencia a la crítica situación económica que están atravesando los fruticultores de la región. Según detallaron, se solicitó con celeridad “la declaración de emergencia provincial y por ende el pedido de la emergencia nacional por daños de heladas y granizo que afectaron la región en temporada 2016/2017 y disposición del certificado correspondiente”.
También plantearon la suspensión de las intimaciones y la prórroga hasta junio de 2018 de “la totalidad de las operaciones crediticias otorgadas por Río Negro Fiduciaria con las condiciones pactadas en la oportunidad de su otorgamiento (ya sean fondos de origen provincial o nacional) en virtud de la situación económica de los productores que ha empeorado sensiblemente”.
Se reclamó a Diomedi que seguiría al frente de Fruticultura hasta que se concrete una nueva designación, el pago urgente a los productores beneficiarios de las cuotas adeudadas del ente de granizo correspondiente a la temporada 2015/2016 y también el pago total del aporte de poda 2016.
