[dropcap]E[/dropcap]l Ejecutivo puntano dijo sin embargo que los fuertes vientos que han retornado a las sierras hacen temer por el reinicio del fuego en algunos lugares, motivo por el cual se mantiene por tierra una vigilancia de cenizas, ya que los aviones están imposibilitados de despegar por razones climáticas.
Así lo informó oficialmente el jefe del programa San Luis Solidario, Darío Zabala, quien destacó que "anoche comprobamos la inexistencia de fuego en los dos últimos lugares que quedaban en la zona de la Quebrada de Huascara y Nogolí, 50 kilómetros al norte de la ciudad de San Luis, pero mantenemos la vigilancia de cenizas vía terrestre porque el avión vigía no puede volar por los fuertes vientos reinantes".
Destacó el funcionario que además de la excelencia de las tareas humanas desplegadas por la totalidad de los bomberos, "ayer fue fundamental que los aviones hidrantes pudieran volar normalmente y atacar los últimos focos de incendios, reduciéndolos a cenizas".
Algunos habitantes de las zonas siniestradas han desmentido el parte gubernamental señalando que todavía hay lugares con fuego, ante lo cual Zabala señaló que "todas las denuncias que recibimos son corroboradas por el personal, pero la situación en estos momentos está controlada".
Indicó que hay una primera estimación de 10.000 hectáreas quemadas, pero productores de los lugares han estimado que son al menos 16.000, sin detallar los daños irrecuperables en la flora y fauna.
Los habitantes castigados por los incendios han manifestado por los medios y las redes sociales su preocupación ante la falta de anuncios del gobernador Alberto Rodríguez Saá acerca de si se dispondrá algún tipo de ayuda para los afectados.
Consultados varios Ministerios respondieron desconocer esa posibilidad, añadiendo que "es una potestad exclusiva del gobernador".
Fuente: Telam