John Deere nacionaliza la producción de su línea de tractores 6J, para comenzar su fabricación en su planta de Granadero Baigorria, provincia de Santa Fe. Así, se suma a las cosechadoras que ya produce en el país.
La compañía indicó que la producción de Serie 6J en el país generará nuevos empleos directos e indirectos y la incorporación creciente de componentes de producción nacional, como fundiciones, llantas, cubiertas y baterías.
Además, precisó que los nuevos tractores contarán con motor nacional, que también ya son fabricados en la planta de Granadero Baigorria.
“Así, reforzamos nuestro compromiso con el campo argentino y también con la industria nacional. John Deere volverá a ser protagonista en un segmento de potencia que representa el 45% de la industria y que demanda tecnología, confiabilidad y posventa de calidad”, afirmó Gastón Trajtenberg, presidente de la firma en el país.
La Serie 6J está compuesta por 6 modelos que van de los 110 a los 205 hp. Con esta incorporación, John Deere apunta a cubrir las necesidades del 90% de la industria de tractores, ofreciendo desde 45 hp hasta 205 hp.
“Los tractores 6J, por su motor, su transmisión y la posibilidad de integrar a la agricultura de precisión, son una opción superadora, que suma tecnología e innovación a los equipos del segmento”, agregó Trajtemberg.