La Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Buenos Aires (FCV- UBA) se encuentra trabajando en un proyecto multidisciplinario en relación al entrenamiento de canes para la detección del agente viral coronavirus del síndrome respiratorio agudo severo tipo 2 (SARS-2, Severe Acute Respiratory Syndrome Coronavirus 2). El virus que produce la enfermedad por coronavirus, o Covid-19.
La capacidad olfativa de los perros ha permitido que, desde hace mucho tiempo, se los entrene para detectar distintas sustancias como estupefacientes, explosivos, divisas, alimentos en las barreras sanitarias, además de la búsqueda de personas con vida en desastres naturales y estructuras colapsadas, búsqueda de restos humanos o en la identificación forense o criminalística.
Últimamente también han ampliado su participación en otros tipos de detecciones dentro del campo de la salud humana. Los cambios que se producen en los compuestos orgánicos volátiles (VOC por sus siglas en inglés) que emite el cuerpo humano al contraer una enfermedad son aislados a partir de muestras de sangre, piel, sudor y orina para ser utilizados en el adiestramiento de los perros detectores.
En la actualidad, los perros pueden detectar episodios de hipoglucemia, cáncer de pulmón, mama, próstata y colon, melanoma además de tuberculosis. En estos casos los tejidos malignos o los trastornos metabólicos liberan sustancias muchas veces detectables por el olfato canino.
Las razas que más frecuentemente se han utilizado para este tipo de entrenamiento son: Pastor Belga Malinois, Labrador Retriever, Pastor Alemán, Sprigel Spagniel, Border Collie, y otras en menor número. Los tiempos de entrenamiento varían de acuerdo con el animal, atendiendo a su ritmo de aprendizaje para preservar su bienestar.
¿Cómo surgió la hipótesis sobre la capacidad de que los perros puedan detectar a personas afectadas por el SARS-CoV2?
En la Escuela de Medicina Veterinaria de Alfort (Francia), bajo el programa Nosaïs (programa de enfoque científico que adiestra perros para la detección médica) el Profesor Dr. Dominique Grandjean ha comenzado una investigación con el fin de comprobar dicha hipótesis, que hasta el momento ha tenido resultados alentadores.
Nuestro objetivo desde la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UBA es incorporarnos al proyecto, adaptarlo a las necesidades locales y sumar evidencia científica acerca de la capacidad de los perros para detectar personas afectadas por COVID-19.
¿Ya se sabe qué perros utilizarán?
Para este proyecto se utilizarían animales ya entrenados en la detección de otros olores, preferentemente detectores de explosivos ya que estos perros han sido entrenados para que realicen una forma de señalización de olor compatible con la requerida en esta tarea. Por lo tanto solo será necesario que ellos aprendan a identificar y memorizar un nuevo olor.
¿Qué protocolo siguen para que no corran riesgo, tanto personas como animales?
Las muestras serán almacenadas en condiciones adecuadas de temperatura y humedad hasta su utilización. Al momento de iniciarse los ensayos estas serán colocadas en dispositivos acondicionados especialmente para que los perros puedan tomar los compuestos orgánicos volátiles de cada uno de ellos, llevando a cabo así los aprendizajes que les permitan reconocer las muestras.
Tanto los canes como las personas involucrados en el entrenamiento para la detección de muestras provenientes de pacientes SARS-COV-2 positivos no estarán expuestos a riesgo alguno proveniente de las muestras. Las muestras utilizadas para la detección por parte de los canes serán tomadas por personal de salud bajo un riguroso proceso. Si bien las tomas provienen de pacientes que cursan la enfermedad, se trata de muestras de sudor donde no se encuentra el agente viral, tomadas sobre gasa estéril, y depositadas en envases herméticos.