El panorama económico parece, de antemano y de mínima, complicado, pero sobre todo es incierto. Por eso, muchos sectores de la economía empiezan a mirar cómo pueden salir de la pandemia, y cuánto llegará a ellos el impacto negativo de la cuarentena.
Agustín Tejeda, economista jefe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, dialogó con Radiocampo sobre su último trabajo, que marca que el agro podría ser uno de los sectores con menor impacto negativo del coronavirus. “El sector se verá afectado como todas las actividades, pero de todos los sectores de la economía, será el que mejor pueda enfrentar esta crisis de proporciones históricas”, dice.
“Semana a semana, las estimaciones de crecimiento de la economía, tanto a nivel global como local, van empeorando, sobre todo a medida que avanza la cuarentena. Estamos ante una de las peores crisis de la historia del capitalismo y una de las mayores después de la Segunda Guerra Mundial”, agrega.
Sin embargo, aclara, es muy distinta en su naturaleza a las crisis ya vividas porque “está causada prácticamente por restricciones físicas al funcionamiento de las actividades”. Ahí es que el agro tiene la particularidad que se da en Argentina y el resto de los países: ha sido declarado actividad esencial y puede seguir trabajando.
“Más allá de algunas restricciones que siguen vigentes o de los protocolos, que pueden generar retrasos o demoras (como ocurrió sobre todo al comienzo de la cuarentena), hoy la actividad se va normalizando y el ritmo se parece al del año pasado. Así lo muestran los indicadores de -por ejemplo- ingreso de camiones al puerto, o los márgenes de cosecha, que inclusive en muchos casos dan niveles superiores a los del año pasado”, comenta.
Para Tejeda, la agroindustria viene respondiendo bien más allá de algunas afectaciones visibles por menor demanda. Aunque también ahí el agro cuenta con una ventaja diferencial: “El campo produce bienes de consumo esencial, por lo que tienen una menor elasticidad de ingreso, es decir, que ante la caída de los ingresos responden negativamente pero mucho menos mal que el resto de los bienes ya sea de servicios o bienes durables”.
“Por eso nos permitimos decir que, de antemano, el agro va a tener un impacto negativo de este contexto pero será bajo y estará mucho más vinculado a la caída del precio internacional y la sequía que nos obligaron a reducir las estimaciones, pero no directamente al coronavirus”, concluyó.
