
En las últimas semanas, las rutas santafesinas se vieron colmadas de camiones con destino a los puertos del Gran Rosario. La cosecha gruesa avanza a ritmo acelerado, y solo entre mediados y fines de abril, el ingreso de camiones superó con creces los niveles habituales: según la Bolsa de Comercio de Rosario, el volumen de soja descargada se disparó un 154% en comparación con días anteriores.
Frente a este escenario, el Gobierno de Santa Fe decidió endurecer los controles para evitar que vehículos sin turno habilitado circulen hacia las terminales. Para ello, puso en marcha el Operativo Cosecha, un amplio despliegue que involucra fuerzas provinciales, gobiernos locales y el sector privado, con una inversión mensual de 100 millones de pesos.
El operativo contempla más de 750 controles de seguridad vial, coordinados por 230 efectivos y 70 vehículos. Además, funciona un Comando Operativo activo las 24 horas, con conexión directa con comunas y fuerzas de provincias vecinas.
El plan también incluye un fuerte componente sanitario: se sumaron 25 móviles de salud (entre ambulancias de alta y baja complejidad), un helicóptero para emergencias y postas médicas operativas todo el día en puntos estratégicos como el peaje La Ribera y el Parque Industrial Alvear.
Como parte del ordenamiento logístico, se implementó un sistema obligatorio de turnos para la descarga de granos. Aquellos que no respeten esta normativa se exponen a sanciones previstas en la Ley 13.169: las multas pueden alcanzar entre 300 y 1000 unidades fijas, lo que equivale a montos de hasta 637.000 pesos.
Además, habrá penalidades para los camiones que estacionen en banquinas o zonas no permitidas, o que no respeten las indicaciones de tránsito. En estos casos, no se permitirá el pago voluntario con reducción.
Los principales controles se concentrarán en la Ruta Provincial 91, a la altura de Andino, donde la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) verificará que cada chofer cuente con carta de porte y turno válido para acceder a los puertos.