Durante un control de rutina en la provincia de Misiones, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y la Gendarmería Nacional decomisaron y destruyeron 56.800 kilogramos de sandías que eran transportadas “sin la correspondiente documentación sanitaria que acreditara su origen e implica un riesgo para los consumidores”.
Las medidas se adoptaron durante sendos procedimientos realizados en el puesto de control de Gendarmería Nacional sobre Ruta Nacional 101, Km 130, del municipio de San Antonio, donde los agentes constataron (el 16 y el 21 de septiembre pasados) que dos camiones transportaban, cada uno, 28.500 y 28.300 kilogramos de sandías a granel sin el correspondiente Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios (RENSPA), documento que asocia al productor con su mercadería y el lugar de producción.
Al desconocerse el origen de la mercadería y por lo tanto, sus condiciones de inocuidad, el SENASA dispuso de manera preventiva su decomiso, desnaturalización y destrucción en el basural del municipio.
“Con este tipo de controles, el SENASA salvaguarda la salud de los consumidores, protege a los productores responsables y la sanidad de la producción vegetal”, consignó un comunicado de prensa del organismo sanitario.