Está demostrado científicamente que las plantas mejoran la calidad de vida de las personas con las que conviven. Basados en esta premisa, cada vez son más los ciudadanos que las incorporan a su vida cotidiana en canteros, jardines verticales, cuadros vivos y techos verdes.
En este contexto, el Instituto de Floricultura del INTA desarrolla variedades a partir de especies nativas. Un adelanto de los temas que se compartirán en la XI Jornada abierta del Instituto de Floricultura, que se realizará el 6 de diciembre en Castelar.
Daniel Morisigue –director del Instituto de Floricultura del INTA– resaltó la importancia de incorporar flores y plantas, tanto en sus usos tradicionales como en otros innovadores que surgen. “Por un lado, tienen beneficios ambientales al mitigar el efecto de isla de calor urbano y, por otro lado, su efecto relajante permite reducir el nivel de estrés en el ambiente, lo cual mejora el paisaje urbano y lo hace menos agresivo”, indicó.
En este sentido, desde el instituto destacan el potencial de las plantas nativas para este tipo de usos. Para los jardines verticales o cuadros vivos, recomiendan implementar helechos nativos como Phlebodium areolatum, Microgramma squamulosa, Campyloneurum nitidum, y Niphidium crassifolium, entre otros.
Estos helechos tienen la particularidad de ser epífitos, por lo que los requerimientos hídricos y nutricionales son mucho menores a los que se cultivan.
En cuanto a las variedades de flores ornamentales desarrolladas por el INTA y registradas en la Argentina, desde el instituto explicaron que la mayoría son florales herbáceas con floración primavero-estival, a excepción de Handroanthus que florece en época otoño-invernal.
Actualmente, el Instituto de Floricultura cuenta con 16 variedades de plantas herbáceas correspondientes a los géneros Glandularia, Mecardonia, Nierembergia y Calibrachoa, y dos variedades florales leñosas de Handroanthus y Tecoma. Todas son de propagación agámica.
Por su parte, los techos verdes son espacios donde la cubierta vegetal es plantada sobre un sustrato de poca profundidad y permiten una amplia variabilidad de especies. De acuerdo con Silvina Soto –investigadora del Instituto de Floricultura–, “si bien el único género apto para estos ecosistemas es el Sedum, existen algunas especies nativas estudiadas en el INTA que podrían ser adecuadas para este uso”.
En el catálogo de plantas para techos verdes disponible en PDF, se presentan las especies más estudiadas en el Instituto de Floricultura para utilizar en estas tecnologías, sumado al detalle de sus características más relevantes y de los sustratos adecuados.
La floricultura a puertas abiertas
Con acceso libre y gratuito, el próximo 6 de diciembre se llevará a cabo la XI Jornada abierta del Instituto de Floricultura en el INTA Castelar. Los interesados podrán recorrer el campo experimental compuesto por 140 parcelas cultivadas con las variedades ornamentales del INTA y materiales en proceso de mejoramiento correspondientes a los géneros Calibrachoa, Glandularia, Mecardonia y Nierembergia.
Durante la jornada, los investigadores mostrarán los materiales selectos obtenidos por el Instituto de Floricultura a partir de especies nativas. El encuentro tiene el objetivo de difusión e intercambio entre los técnicos, productores florícolas, paisajistas y público en general.
Como en las ediciones anteriores, se realizarán encuestas de opinión a fin de conocer las necesidades y demandas del mercado, así como otras apreciaciones y valoraciones del público.