Con 1150 millones de litros, la producción de etanol alcanzaría este año un récord histórico.
Tendría un incremento del 4,1% respecto al año pasado, y de un 24,2% en comparación al 2016, según datos del informe anual de biocombustibles publicado por el USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos).
Tal como informó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el aumento se registraría en respuesta a una creciente demanda interna que también estaría alcanzando niveles sin precedentes."Al no haber exportaciones de etanol, la producción crece de la mano con las necesidades domésticas, principalmente para abastecer los requisitos de mezcla con nafta, cuya tasa de corte obligatoria es del 12%", comentaron los especialistas Julio Calzado y Franco Ramseyer.
Allí explican que el 55% del etanol elaborado se haría en base a maíz, mientras que el 45% restante tendría como insumo a la caña de azúcar. "En realidad, el mandato oficial determina que ambos insumos deben ser utilizados en iguales proporciones.
Sin embargo, la caña de azúcar perdió participación relativa al enfrentar problemas de suministro en los primeros meses de este año, los cuales fueron originados, en primer lugar, porque el gobierno redujo los preciosoficiales y no distribuyó las cuotas individuales de las compañías en la última parte de 2017. En segundo lugar, las fuertes lluvias que ocurrieron en febrero en el norte afectaron la producción y la logística", destacó el informe.
La capacidad teórica de producción (en las fábricas) rondaría los 1270 millones de litros, es decir, 70 millones más que en el año previo, y un 33,7% superior al 2016. En total, existen alrededor de 10 plantas industriales en base a azúcar localizadas en Tucumán, Salta y Jujuy, mientras que hay otras 5 plantas que producen etanol, en base a granos (casi exclusivamente maíz) en el centro del país.
El USDA estima que en los próximos 3 a 4 años la capacidad productiva aumentaría hasta los 1400 millones de litros, gracias a ampliaciones en las plantas ya existentes. En tanto, el uso del etanol como combustible crecería un 7,2%, mientras que la tasa de corte efectiva aumentaría en 0,2%, ubicándose en 11,8%