En la última semana el Gobierno nacional aumentó la proyección de producción de maíz en un millón de toneladas. Así, se consolidó el récord y finalmente se estima una producción total de 57 millones de toneladas para ese cultivo en esta campaña. Esto, claro, tiene un impacto en los productores y en la economía en general.
Sobre eso dialogó con Radio Campo -por Radio Colonia- el Economista Jefe de FADA, David Miazzo, que advierte que se trata de una noticia “excelente”, porque más producción significa mayor ingreso de lo esperado para los productores.
Más allá de la rentabilidad, significa una buena noticia por su impacto en la sustentabilidad de los sistemas productivos y los suelos. “Veníamos de muchos años de una mala rotación entre gramíneas y oleaginosas, sobre todo maíz y soja, y estos años ha mejorado mucho por el aumento del maíz en verano y del trigo en invierno”, dijo, y agregó que así, los suelos incorporan más materia orgánica, y eso hace más sustentable a la producción e incluso permite producir mayor cantidad.
Impacto en la economía
Miazzo destacaba que, en una macroeconomía que necesita los dólares, mayor producción representa mayores exportaciones y mayor aporte de divisas. Y en una economía cuya actividad no mejora y con falta de empleo, se ve claro cómo la producción dinamiza los fletes, las ventas, y todo lo que se involucra a la producción.
Por eso, advertía, cuando hay mayor producción como en este caso con el maíz de la campaña 2018/19 que llega a su récord, hay más trabajo en toda la Argentina, y se dinamiza mucho el interior del país.
Maquinaria agrícola
Para el especialista, el consumo de bienes durables como los vehículos o la maquinaria, siempre está muy motorizado por el crédito. Ante la faltante de créditos por las elevadas tasas, hay menos incentivos para adquirir maquinaria.
Sin embargo, dice, este año se empieza a ver un leve repunte, atado sobre todo a que los números del año pasado fueron muy malos. Así, y traccionado por una buena campaña, la comparación será positiva aún cuando todavía existen las condiciones crediticias adversas, concluyó.