Los churros son un postre originario de Portugal y actualmente se come en distintas partes del mundo. Los portugueses trasladaron este alimento a la península ibérica. Los churros arribaron a Argentina durante el siglo XIX cuando los españoles llegaron a América Latina.
En ese sentido, este postre se agrupó con las rutinarias comidas locales, se adecuaron a los ingredientes y sabores del territorio. Actualmente, los churros pueden comerse solos o con distintos rellenos, por ejemplo con dulce de leche o con crema. Los churros tradicionales se hacen fritos y suelen tener azúcar, sin embargo, se pueden cocinar de forma más saludable.
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Cómo hacer churros más sanos
Aquellas personas que quieran comer churros de forma más saludable, deberán tener en cuenta los siguientes ingredientes, y después seguir estos pasos:
Ingredientes
1 taza de harina integral.
1 taza de agua.
2 cucharadas de aceite de coco o aceite de oliva.
1 cucharadita de sal.
1 cucharadita de polvo de hornear (opcional).
2-3 cucharadas de azúcar de coco o stevia (opcional).
1 cucharadita de canela en polvo.
Aceite en aerosol para hornear.
Procedimiento
Prepará la masa.
En una cacerola, calentar el agua con la sal y el aceite de coco o aceite de oliva hasta que hierva. Una vez que el agua esté hirviendo, bajá el fuego bajo y añadí la harina integral de golpe, remové rápidamente con una cuchara de madera hasta que la masa se despegue de los lados de la cacerola y forme una bola.
Si decidís usar polvo de hornear, mezclá con la harina antes de añadirla al agua.
Dejá enfriar un poco la masa.
Formá los churros.
Colocá la masa en una manga pastelera con una boquilla en forma de estrella.
Precalentá el horno a 200°C (392°F) y cubrí una bandeja de horno con papel pergamino. Rociá ligeramente con aceite en aerosol.
Formá los churros sobre la bandeja, presionando la masa desde la manga pastelera.
Hornear
Horneá los churros durante unos 15-20 minutos o hasta que estén dorados y crujientes.
Si preferís una textura más crujiente, podés darles la vuelta a mitad de cocción para asegurarse de que se doren uniformemente.
Recubrimiento
Mientras los churros están todavía calientes, mezclá el azúcar de coco o stevia con la canela en un plato.
Pasá los churros por esta mezcla hasta que estén bien cubiertos.
Para una opción aún más saludable, podés evadir el azúcar del recubrimiento y simplemente espolvorear un poco de canela. Incluso, se pueden acompañar los churros con un dip de chocolate oscuro derretido (al menos 70% cacao) o con una salsa de frutas naturales.
