En paralelo a los tests PCR que se hacen actualmente en el país para detectar coronavirus, se harán también pruebas rápidas, anunció el ministro de Salud, Ginés González García, que adelantó también que se compraron 200.000 reactivos para esto.
Estas pruebas servirán para “la investigación de la circulación epidemiológica del virus” y no para diagnóstico, explicó, ya que ambos tests son complementarios. “Se habla de reactivos lentos y rápidos, que son para distintas cosas”, aclaró Ginés.
La técnica PCR, que se usa en el Instituto Malbrán y otras instituciones provinciales, es para verificar los casos positivos. “Fue desarrollada por los alemanes y detecta la existencia del virus desde el primer día que está en el cuerpo”, dijo el ministro en una exposición por videoconferencia ante la comisión de Salud de Diputados.
Por otro lado, el test rápido se usa para la evolución de la enfermedad. “Si bien es veloz en el procedimiento, en realidad es tardío. Porque permite detectar el virus recién siete u ocho días después de su ingreso al organismo, cuando ya desarrolló anticuerpos”, añadió González García aclaró.
A pesar de que la OMS recomienda analizar masivamente, y que países como Corea del Sur tuvieron muy buenas experiencia con ese método, no se realiza en Argentina. En el país se hicieron hasta el momento, aproximadamente, unos 5000 tests de coronavirus.
Al respecto, el Ministerio de Salud asegura que trabaja en ampliar ese número, ya se compraron más reactivos, que llegarán en los próximos días, y se descentralizó la capacidad de testear unos cincuentas centros de todo el país.