Se trata de un predio de 32 hectáreas que serán desocupadas y devueltas a la Ciudad según un cronograma pautado para hacer efectiva la restitución antes del 31 de diciembre de 2018.
El gobierno porteño pretende reubicar el punto de venta de ganado vivo por varios motivos: por un lado desde 2001 está vencida la prórroga de concesión del uso de esas tierras, y por el otro está el sentido común ya que en ninguna ciudad del mundo existe un mercado de ganado en pie como ese en plena ciudad de Buenos Aires.
El cuanto al destino del predio, las opciones más destacadas incluyen la creación de un polo educativo, la de un distrito de la carne, con zonas comerciales y educativas y por último, la opción que reúne más críticas de los vecinos, el simple uso inmobiliario.
El Jefe de Gobierno Porteño afirmó: "Esta mudanza va a mejorar la calidad de vida de los vecinos del barrio, que tenían que convivir con la contaminación que genera el ganado"
