Se volvió viral un video en el que se ve claramente como tiran más de 8.000 kilos de mandarinas a la basura. Las imágenes fueron registradas en Chajarí, Entre Ríos, una de las principales regiones citrícolas sobre la costa del Río Uruguay. Una vez que se difundieron en las redes, las opiniones que se generaron fueron de todo tipo, desde indignación -porque no las regalaron- hasta aquellos que comprenden la decisión de los productores.
Sin embargo, no será ni la primera ni la última vez que sucedan este tipo de situaciones. Algunos de ellas se conocen y muchas suceden sin que haya imágenes. Es que los alimentos perecederos al no consumirse o poder continuar con el proceso de industrialización por X motivo, se descomponen y deben ser desechados. Ahora la pregunta es: ¿Por qué en un país con tanta necesidad y pobreza se llega a esto?
Por qué se tiraron miles de kilos de mandarinas en Entre Ríos
El video lo difundió el productor Elvio Calgaro, quien también es dirigente de la Federación Agraria y ex presidente de la Federación de Citricultores de Entre Ríos -Fecier-.
"Esta fruta es perecedera, como el tomate, llega su momento y si no la consumiste se empiezan a pudrir, entonces no llegan al mercado, no la podés mandar. Y eso que es para muchos de las mandarinas más apetentes, la más rica. Es la criolla, la más económica. Bueno, lamentablemente están pasando estas cosas porque no se la pudo sacar en tiempo y forma al mercado. Se pasó y vienen detrás otras variedades. Ahí están los resultados”, dijo Calcagno en declaraciones a AM 550.
“Veníamos bien y las ofertas iban acompañando la demanda en los últimos dos o tres años, por la sequía había un equilibrio. Pero llegaron las lluvias, acompañadas por el receso económico. El poder adquisitivo de la gente se cayó, se desplomó, eso es lo que nosotros notamos, y por lo tanto hay un poco más de fruta pero menos consumo”, indicó el citricultor.
“Lo peor que le puede pasar a un productor es ver tirar su producción, porque detrás de cada mandarina hay mucho esfuerzo, mucho sacrificio. No hay salida (hacia el mercado) y se vienen otras variedades, y hay que tirarla. Sí tenemos conocimiento de que mucha fruta de esta variedad va a quedar en la planta. Se anuncian heladas el domingo. Creo que seguramente va a ayudar a que se vayan al piso”, agregó Calcagno y detalló que el segmento se distribuye un 70% para el consumo fresco, un 20% para la industria y solo 10% para la exportación.
“Notamos nosotros que hay un problema serio en el consumo, no hay fuerza, porque si hoy te pagan 150 pesos un kilo, a la fábrica ya no le están cerrando los números tampoco a 150. Enfrente tenés un litro de gasoil que en el interior vale 1300 pesos. ¿Cuántos kilos necesitas de mandarina para comprar un litro de gasoil? Y bueno, estamos complicados, porque aparte se suman todos los costos. Arrancamos así, tenemos miedo que por ahí esto pase a otra producción, a otra variedad, que se prolongue en el tiempo”, dijo el productor en la entrevista radial.