
La cadena argentina de leche atraviesa un 2025 con resultados destacados a nivel global. Según el último informe del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), el país encabeza el ranking internacional de crecimiento en producción de leche durante el primer semestre del año.
Aunque esta mejora responde en parte a la recuperación tras la fuerte caída registrada a comienzos de 2024, los números actuales son contundentes: los tambos argentinos aumentaron su producción un 11,7%, muy por encima del promedio global del 1,05%.
El relevamiento de OCLA abarca a los principales países que concentran más del 55% de la producción mundial de leche de vaca. En este marco, Sudamérica se posicionó como la región más dinámica: detrás de Argentina aparecen Chile (8%), Brasil (6,2%) y Uruguay (5,7%). En contraste, Australia (-2,7%), China (-1,2%) y la Unión Europea (-0,6%) registraron retrocesos.

Un dato adicional que resalta la magnitud del crecimiento local es la variación absoluta en litros: entre enero y junio, Argentina produjo unos 500 millones de litros extra, cifra comparable a la de Estados Unidos (con apenas un 1% de incremento) y solo superada por Brasil, que sumó casi 800 millones de litros.
A nivel general, la producción conjunta de los principales oferentes del mercado internacional (Unión Europea, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Australia, Argentina y Uruguay) fue apenas un 0,6% mayor que en 2024. Esta oferta acotada, junto con la reactivación de la demanda —particularmente de China y el Sudeste Asiático—, explica los elevados precios actuales de las commodities lácteas.

De cara a lo que resta del año, los organismos internacionales prevén que la producción mundial de leche crezca entre 0,4% y 0,8%. Argentina, sin embargo, volvería a destacarse: las proyecciones señalan que el país podría cerrar 2025 con una expansión cercana al 6%, consolidando su liderazgo en el mercado lechero global.