
Según la Bolsa de Cereales de Córdoba, la cosecha de soja en Estados Unidos avanza sobre el 9% del área destinada a la oleaginosa. El Departamento de Agricultura estadounidense (USDA) informa que el 61% del cultivo se encuentra en estado bueno y excelente, un nivel algo inferior al registrado en la misma fecha del año pasado (63%).
En tanto, señalan que el USDA “aumentó levemente su proyección de producción respecto a agosto, estimando 117,1 millones de toneladas de soja para la campaña 2025/26. Se espera, además, una caída del 3,65% en los stocks iniciales y un consumo interno de 72,5 millones de toneladas (+5,3% intercampaña).”

Sin embargo, el organismo redujo sus expectativas de exportaciones a 45,9 millones de toneladas, lo que aliviaría la presión sobre los stocks finales, previstos en 8,2 millones de toneladas (+3,55% intermensual). La relación stock/consumo subiría levemente al 6,9%, por debajo del promedio histórico de las últimas 18 campañas (7,3%).
A nivel mundial, la relación stock/consumo se mantendría relativamente alta, en torno al 29,3%, con una cosecha récord estimada de casi 426 millones de toneladas.
Soja en el hemisferio sur: proyecciones
En el hemisferio sur, Brasil proyecta un área sembrada de soja de más de 49 millones de hectáreas, un incremento del 3,7% intercampaña, y una producción récord de 177,6 millones de toneladas, si se repiten los rendimientos previos. Por su parte, Argentina estima sembrar 17,5 millones de hectáreas, un 3% menos que el ciclo anterior, lo que mantendría la producción en niveles similares a los últimos años (48-50 millones de toneladas).

En el plano de precios, la soja en Chicago promedia USD 380/Tn, levemente superior a septiembre del año pasado, aunque la cotización se mantiene lateral. La combinación de stocks ajustados en EE. UU. y buenas perspectivas productivas en Brasil y a nivel global genera un escenario de equilibrio, sin grandes alzas previstas a corto plazo. Asimismo, la eliminación temporal de derechos de exportación en Argentina podría impactar en los precios internacionales si se anticipa un aumento en las ventas externas.
Para los productores rurales, el panorama indica la importancia de seguir de cerca la evolución de la cosecha y los mercados internacionales, planificar ventas y considerar la rentabilidad frente a un escenario de producción estable pero con presiones sobre los precios.