Después de las elecciones primarias del domingo pasado, el plano político quedó, en primer lugar, sorprendido por la enorme diferencia entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, después de conocerse que Alberto Fernández superó por más de 15 puntos a Mauricio Macri y Axel Kicillof hizo lo propio por más de 17 puntos contra María Eugenia Vidal.
El analista político y columnista de Radio Campo -por Radio Colonia-, Sebastián Dumont, explicaba que se esperaba que ayer el Presidente Macri reconociera algo, o al menos una situación difícil de remontar desde los números.
Sin embargo, cuenta, el Presidente habló como si siguiera en campaña electoral y pudiera revertir ese resultado. “Habló como si no estuviese pensando en encontrarse con quien, muy probablemente, sea el próximo Presidente de los argentinos”, dijo.
Lo que plantea Macri, señala Dumont, es “cuidado que, si no ganamos, viene el caos”. Eso se vio manifestado en la reacción del dólar, de la Bolsa, los bonos, etcétera. Para el analista, esto puede calmarse un poco pero se profundizaría si gana Fernández en octubre.
“Se esperaba algo más del Presidente, y ahora queda ver cómo es el futuro inmediato de Argentina de acá a octubre, que todavía está lejos”, manifiesta.
¿Y Lavagna?
El nombre de Roberto Lavagna, cuya alianza y “tercera alternativa” logró poco más del 8% de los votos, suena en todos los partidos. Al menos, en los dos que polarizaron la elección. Quien se habría comunicado con él, sin embargo, es Alberto Fernández.
Según comentó Dumont, le habría propuesto reunirse al economista, pero éste no lo cree posible en el corto plazo porque confía en hacer una mejor elección desde Consenso Federal para octubre.
Por eso, se demoraría su posible alianza. Pero sí quedó la sensación de que, si hubo un sector político que intentó enviar una señal a Lavagna, fue el Frente de Todos, que lo nombró en dos ocasiones, durante los discursos de Sergio Massa y Alberto Fernández.
