La organización CampoLimpio gestiona la economía circular de los envases vacíos de fitosanitarios y se encarga de su recuperación o disposición final. Desde la entidad insisten en que el desafío de un campo sustentable requiere del compromiso de todos, por eso trabajan activamente con la comunidad agropecuaria y el sector público.
Sobre eso dialogó con Palabra de Campo -por Radio 10- el Director Ejecutivo de Campo Limpio, Ernesto Ambrosetti, que explicó que es en el marco del concepto de desarrollo de la economía circular a través de una cadena de valor sustentable, que presentaron esta iniciativa en el país. Con la posibilidad de articular las acciones del sistema, trabajar con actores públicos y privados para concientizar sobre los hábitos, usos y costumbres en el proceso de recuperación de los envases vacíos de fitosanitarios, se puede implementar un sistema de gestión integral, sostiene.
El proyecto, indicó, contempla el desarrollo de Centros de Almacenamiento Transitorio (CAT), la implementación de una logística integral, la capacitación de la cadena (distribuidores y productores) y la trazabilidad de los envases vacíos para recuperar, reciclar, reutilizar y revalorizar.
Alrededor de 100 empresas están adheridas a CampoLimpio y representan más del 90% de los envases que se comercializan en el mercado. El sistema de gestión de envases se presentó en las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y actualmente cuentan con Centros de Acopio Transitorio (CAT) en funcionamiento.
Se trata de instalaciones que se utilizan para recepcionar, acondicionar y derivar los envases vacíos de fitosanitarios a los canales de valorización o disposición final. Tiene bajo análisis más de 60 localidades en todo el país. Según contó Ambrosetti, esperan llegar a cerca de 15 centros hacia fin de año y proyecta más de 20 para el 2020.
La actividad de Campo Limpio se enmarca en la Ley 27.279 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental para la de Gestión de Envases Vacíos de Fitosanitarios que establece las responsabilidades de todos los actores de la cadena en el tratamiento de los envases vacíos, siendo las empresas los responsables del armado de un sistema de gestión integral.
Cómo vuelven los envases
Los responsables de devolver los envases son los usuarios, explica. Eso significa que pueden ser los productores y/o aplicadores. Es decir, se toma el CUIT del usuario, y pueden pasar hasta 365 días para la devolución del envase.
El mismo no puede devolverse en cualquier condición, advierte. La clave es el lavado, llamado por ellos “triple lavado” o “lavado a presión”, dos alternativas para limpiarlos. Así como para enjuagar una botella de gaseosa, se lava tres veces el bidón, y lo más importante es luego perforarlo. Con eso, se aseguran de que no se utilice por personas para transportar agua, leche u otros productos.
Una vez cumplida esa primera obligación, el productor o aplicador sólo tiene que acercarlo al CAT más cercano. Una vez limpio, estará además organizado, y queda bajo la logística de Campo Limpio.
