La Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) desarrolló una herramienta para estimar las reservas de agua en los diferentes suelos de la Argentina, con la colaboración del Servicio Meteorológico Nacional y del INTA, que está disponible de manera libre y gratuita en las web de las tres instituciones. Con información publicada en tiempo real sobre el avance de una sequía o de superficies anegadas, representa un elemento fundamental para tomadores de decisión a escala departamental y nacional.
“El modelo de Balance Hídrico Operativo para el Agro (BHOA) tiene como objetivo proporcionar una herramienta de decisión objetiva y en tiempo real para los tomadores de decisión del sector agrícola, así como para generar una base de datos de agua en el suelo disponible para la comunidad científica y educativa”, detalló María Elena Fernández Long, investigadora de la Cátedra de Climatología y Fenología Agrícolas de la FAUBA y responsable del desarrollo del modelo, por parte de esa institución, junto a la profesora Liliana Spescha.
Además, afirmó que esta herramienta -que cuenta con un historial de 60 años de datos sobre la humedad de suelo- es muy importante en un país como la Argentina, por la magnitud del sector agrícola y por la sensibilidad de los cultivos ante fenómenos extremos como una inundación o una sequía, puesto que la mayor parte de la producción agrícola se realiza en secano (sin riego). En este sentido, recordó que la sequía de la campaña 2008/09, por ejemplo, generó pérdidas en maíz por 8,9 millones de toneladas, equivalentes a una disminución de 40% respecto del ciclo anterior.
Spescha destacó el valor del trabajo conjunto alcanzado entre la FAUBA, el Servicio Meteorológico Nacional (cuyos responsables del proyecto son Lorena Ferreira y María Eugenia Bontempi) y el INTA (a cargo de Roberto De Ruyver), para desarrollar el modelo, aportar información y ponerla a disposición de los interesados en sus sitios de internet.
Hacia adelante, los docentes destacaron que la publicación actual es sólo un primer paso: “Estamos trabajando para poder realizar pronósticos y sumar mejoras en los datos que alimentan al modelo, tanto en las observaciones de estaciones meteorológicas como en la incorporación de información satelital e información de suelos”.
Mientras tanto, ya están trabajando para implementar el modelo en otros países de América latina. La primera acción en esta línea avanzaría en Paraguay, junto a la Facultad Politécnica de la Universidad Nacional de Asunción, donde se comenzaron a llevar a cabo tareas en conjunto en 2013, con un curso de capacitación, y continuaron durante 2015 con el armado de un grupo de trabajo para la implementación del modelo BHOA en ese país.