Según informaron desde el sector a Radio Dos, “tuvimos un incremento de entre 2 y 5 pesos, los cortes que tenemos a $110 pasaron a costar $115, algunos de novillo de $90 a $100, y otros de $50 a $55”.
En ese marco, detallaron que “lo que más está saliendo ahora es el cerdo”, ya que “la gente dejó de comprar carne”. Asimismo, manifestaron que los cortes que se vieron más afectados por estas subas son la pulpa, la carnaza y las carnes con hueso.
En este contexto de inundaciones que no es ajeno a la provincia, desde el sector cárnico habían advertido a El Litoral que la llegada del invierno podría traer consigo un fuerte incremento en el importe del producto. Si bien no fue significativo, a principios de mayo había “entrado poca carne”, de acuerdo a lo consignado, y esto dejó como saldo un aumento.
De todas formas, pese a que en algunas carnicerías intentan sostener los números desde la última suba en agosto de 2016, los carniceros habían remarcado que “el aumento de la carne podría ser muy fuerte en invierno” y podría llegar inclusive antes de esta época. Por supuesto, dependerá también de cada negocio.