La agroecología es un boom en los últimos años y cada vez más personas apuestan por ella. En Twitter, se viralizó un hilo de un becario del Conicet, Juan Martín Azerrat, en donde "destruye" mitos acerca de esta práctica. ¿Hay más mitos que verdades?
En un punteo incluye seis curiosidades acerca de la agroecología. Juan Martín comienza su debate sobre si "la agroecología es volver para atrás". A lo que responde que las prácticas ecológicas y el cuidado de suelo "no puede realizarse sin innovación constante y de calidad. Desde adaptar maquinaria hasta probar rotaciones y recrear ecosistemas".
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En segundo lugar, indica que existe un mito que la agroecología "no es rentable". Azerrat comenta que hay "campos convencionales" que se han fundido, pero no los "agroecológicos". Y remarca que son "empíricamente rentables pero en sistemas productivos estables". Además subraya que estos tipos de campos no buscan una productividad total sino el "equilibrio entre producción y sostenibilidad".
"Genera menor rinde", es otro de los mitos que se le adjudican a este tipo de producción. Pero Juan Martín pone las cartas sobre la mesa e indica que competir contra los organismos modificados genéticamente (OGM) es "desigual".
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Sin embargo, el becario de Conicet apunta que a largo plazo el rinde es constante y no "está atado a insumos dolarizados" ni a la fragilidad ante eventos climáticos extremos. "El rinde es constante, no un sube y baja", relata.
En cuarto lugar, discute acerca de que si es "una economía de subsistencia". En esta expresión, Juan Martín apunta contra una técnica en biotecnología vegetal la cual "vincula a la agroecología con el trabajo esclavo" y para el becario este tipo de trabajo está "asociado a campos convencionales". En ese sentido, explica que al ser trabajo-intensivo, se invierte en las condiciones de bienestar laboral.
"No es políticamente viable", es el quinto mito que discute Azerrat. Allí nombra a distintas zonas del país que están asociados a la Red de Municipios y Comunidades que fomentan la Agroecología (RENAMA) para "conocer las experiencias" asociados a políticas públicas y agroecología.
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En último lugar debate acerca de si la agroecología genera o no trabajo. En ese marco, Juan Manuel señala que para llevarla adelante se necesita "pensamiento-estrategia-fuerza humana" para funcionar. Al ser una producción intensiva, en misma superficie, la agroecología necesita más fuerza humana que la convencional.
A su vez, apunta a las problemáticas que existen en la actualidad para la agroecología: "Falta profesionales asesores y peones".
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