La planta que Biogénesis Bagó construyó en China, Yangling JINHAI Biotechnology Co, recibió recientemente las certificaciones de “Buenas Prácticas de Manufactura” del Ministerio de Agricultura de China, y obtuvo las licencias necesarias para comenzar a producir y comercializar la vacuna antiaftosa destinada a cerdos y bovinos. Esto convierte a Biogénesis Bagó en el primer laboratorio extranjero en producir en China.
China posee la mitad de la población mundial de cerdos (700 millones) y el doble del stock bovino de Argentina (110 millones), con una demanda creciente del mercado interno y sin poder aún resolver ciertas enfermedades, como la fiebre aftosa, que limitan la producción de carne y leche.
Como socio, Biogénesis Bagó aportó la tecnología y el conocimiento que desarrolló a lo largo de su historia en el marco de un proyecto industrial que cumple con los más altos estándares internacionales de calidad. Además, servirá para que China pueda producir vacunas según sus respectivas cepas circulantes, algo que solo era posible con una planta en ese país.
Este paso fundamental en el desarrollo tecnológico y empresarial de Biogénesis Bagó no hubiese sido posible sin el acompañamiento de ambos gobiernos; que se logró a través de la firma de acuerdos específicos de cooperación.
Entre las más modernas del mundo
La planta de JINHAI se encuentra en la ciudad de Yangling, Provincia de Shaanxi, en el centro del país asiático, a 70 km de la ciudad de Xian, primera capital imperial China. Es uno de los desarrollos industriales más modernos del mundo y cuenta con la última tecnología en producción de cultivos celulares, purificación de antígenos y formulación de vacunas. Surgió como resultado de un joint venture entre Biogénesis Bagó y el laboratorio chino Hile Biotecnology Co, una empresa privada que elabora vacunas de alta tecnología para aves y cerdos.
La nueva planta de Biogénesis Bagó implicó una inversión aproximada de 60 millones de dólares y tendrá una capacidad productiva de 400 millones de dosis por año. Como parte del proceso de transferencia tecnológica, la compañía entrenó durante los últimos cuatro años a gran parte del personal que hoy está operando la planta.
“Es un enorme logro para el país poder exportar biotecnología y conocimiento al mayor mercado mundial de vacuna antiaftosa. Además, el acuerdo es un ejemplo de lo que la cooperación entre empresas desarrolladoras de tecnología e innovación pueden lograr juntas para contribuir a una mejor alimentación”, explicó Hugo Sigman, accionista de Biogénesis Bagó y CEO del Grupo Insud.
El presidente de la Nación Mauricio Macri en el cierre del Foro de Negocios e Inversiones Argentina – China 2017 celebrado en Beijing destacó que “el país tiene mucho para aportarle a China en cuanto a seguridad alimentaria y desarrollos de tecnología”, manifestando en tal sentido que “Argentina se propone duplicar la producción de alimentos en los próximos 5 a 8 años”.
Por su parte, el Ministro de Agroindustria Ricardo Buryaile fue recibido por su par chino HAN Changfu, contexto en el cual repasaron los hitos de los últimos años de cooperación bilateral en áreas como la biotecnología donde destacaron la asociación entre ambos laboratorios y el comienzo de la producción de vacuna antiaftosa en JINHAI.
Con este logro, Biogénesis Bagó continúa afianzando su expansión internacional. Recientemente abrió su oficina comercial en Shanghai y está exportando vacunas a Corea, Taiwán y Vietnam, de este modo lleva al país a la frontera de conocimiento y tecnología en esta materia, un orgullo que comparte con las instituciones y organismos de salud animal de la Argentina.