
El sector lechero se encuentra pasando un buen momento, con un crecimiento del 10,9% en la producción durante el primer trimestre de 2025, en comparación con el mismo período del año anterior. Así lo indicó un informe reciente de la Dirección Nacional de Lechería, dependiente de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca.
El impulso no solo se refleja en el acumulado trimestral. Si se toma marzo de forma aislada, la producción mostró un salto interanual del 15,9%, destacando la tendencia alcista del sector.
Entre los factores que explican este escenario favorable se encuentran las condiciones climáticas positivas (lluvias y buen tiempo), así como un precio atractivo de la leche para el productor. Esto se traduce en una racha de 13 meses consecutivos de rentabilidad positiva. Solo en febrero, esta rentabilidad se ubicó en el 3,8%.
En cuanto al consumo interno, los datos de enero y febrero de 2025 muestran una mejora en la demanda de todos los productos lácteos respecto al mismo bimestre del año anterior. Las ventas de leche en polvo aumentaron un 45%, las de leche fluida un 13,3% y las de quesos un 11,5%, según datos relevados por la Secretaría mediante la Resolución 230.
A nivel internacional, los lácteos argentinos siguen ganando terreno. Actualmente se exporta a más de 85 países y, en febrero de este año, el ingreso de divisas por exportaciones subió un 16% respecto a enero y un 8% frente al mismo mes de 2024. Estos datos, elaborados por la Dirección Nacional de Lechería en base al registro del INDEC, dan cuenta del peso creciente del sector en el comercio exterior.
La leche en polvo entera, principal producto de exportación, registró un precio promedio de USD 4.019 por tonelada en febrero, lo que representa un incremento del 2% en relación al mes anterior.
El contexto también se ve fortalecido por el acceso al crédito. Desde mediados de 2024, el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) impulsa líneas de financiamiento ajustadas al valor producto, es decir, con cuotas expresadas en litros de leche. Hasta la fecha, ya se han asignado $20.000 millones destinados a modernizar los tambos mediante la incorporación de robótica, mejoras en sanidad animal y avances en genética.
