Continúa la recolección de los cuadros más tempranos de soja de primera, concentrándose la actividad sobre ambos núcleos y el Centro-Norte de Santa Fe. Tras relevar un avance intersemanal de 2,6 pp, los rendimientos recolectados se ubican por debajo a las expectativas iniciales e inclusive de los promedios históricos, alerta la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Dada la importancia de las regiones mencionadas por su aporte al total del área
implantada, la Bolsa de Cereales ajusta la proyección de producción para la campaña 2020/21 a 43.000.000 Tn, reflejando una caída de 1MTn con respecto a la semana pasada.
Sobre el extremo norte del país, el cultivo se encuentra en las etapas finales del llenado de grano. Mientras el NOA informa que las labores podrían comenzar durante los próximos siete días, en la región NEA la falta de piso como consecuencia de las lluvias del pasado lunes demora el inicio de la trilla.
Ambas regiones, donde se concentra más del 17 % del área sembrada a nivel nacional, reportan una importante heterogeneidad en el crecimiento del cultivo, pérdidas en el stand de plantas y un rinde esperado por debajo de los promedios históricos.
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Paralelamente, sobre el centro del área agrícola, los resultados a campo comienzan a reflejar el impacto de la sequía durante los meses de febrero y marzo, momento en el cual la soja de primera se encontraba su periodo crítico entre plena formación de vainas (R4) y pleno llenado de grano (R6).
Los mayores progresos fueron reportados sobre ambos Núcleo Sur y Norte, donde se
relevaron rindes dispares con mínimos de 17qq/ha en la localidad de Sargento Cabral y máximos puntuales de hasta 52 qq/ha en la localidad de Marcos Juárez. A la
fecha, el rinde promedio sobre ambas regiones reporta mermas de entre un 12 % y 5 % respectivamente, en comparación a los rindes esperados.
Finalmente, sobre el sur del área implantada, mientras al comienzo de la campaña las lluvias acompañaron al cultivo, la falta de precipitaciones durante los últimos dos
meses comprometió el crecimiento en plena etapa crítica de determinación de rindes. Se espera que las labores de trilla comiencen durante los próximos siete días y se prevén rindes por debajo a los promedios de los últimas 5 campañas.