
Un operativo sanitario encabezado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), junto a la Dirección de Fiscalización y Control del Ministerio de Bioagroindustria de Córdoba, derivó en la interdicción de tres establecimientos agropecuarios en la localidad de Villa Nueva, al sur de la provincia.
La intervención se realizó con orden judicial y contó con el respaldo de la Patrulla Rural, dependiente de la Policía provincial. La acción conjunta permitió detectar una serie de irregularidades graves vinculadas a la tenencia y faena de animales en condiciones fuera de la ley.
Falta de higiene, documentación y habilitaciones
Durante la inspección, los agentes comprobaron que las unidades productivas no cumplían con las condiciones higiénico-sanitarias mínimas para la cría y manejo de ganado. Se identificaron más de 270 bovinos y 60 porcinos sin la documentación sanitaria exigida y en un contexto de alimentación inadecuada, lo que representa un riesgo tanto para el bienestar animal como para la salud humana.
En uno de los establecimientos también se hallaron medias reses y cuartos de carne bovina y porcina, junto con equipamiento de faena clandestina, sin ningún tipo de habilitación sanitaria ni sistema de refrigeración que garantice la inocuidad del alimento.
Frente a esta situación, el Senasa procedió a decomisar y desnaturalizar toda la carne encontrada, destruyéndola bajo supervisión oficial para evitar su ingreso al circuito comercial.
Hasta que se definan las sanciones administrativas y sanitarias correspondientes, todos los animales permanecerán retenidos dentro de los establecimientos, bajo vigilancia oficial. Las autoridades señalaron que se evaluarán posibles infracciones a la Ley de Policía Sanitaria Animal y otras normativas vigentes.
El objetivo: proteger la salud pública
Desde el Senasa recordaron que estas acciones buscan prevenir riesgos sanitarios graves, como enfermedades transmitidas por alimentos mal manipulados o carnes provenientes de faenas clandestinas. Además, se trata de evitar que productores que incumplen con las normativas compitan de forma desleal con quienes sí respetan las reglas.
“Este tipo de operativos son fundamentales para cuidar al consumidor y mantener la trazabilidad de la producción animal. No se puede permitir que llegue a la mesa de las familias un producto sin controles”, indicaron desde la entidad.
Las autoridades continuarán con los controles en la región, y se prevé que se intensifiquen en las próximas semanas. Mientras tanto, pidieron colaboración a la población para denunciar prácticas irregulares y comprar alimentos solo en comercios habilitados, con productos debidamente rotulados y conservados.